La música dejó de sonar en la casa 59G-117 del barrio Integración Comunal y solo se escuchaban los gritos de los invitados, mientras corrían para esconderse de las balas
Al menos 10 detonaciones interrumpieron ayer, a las 5.00 de la mañana, el baile de los invitados de un open gay. La música dejó de sonar en la casa 59G-117 del barrio Integración Comunal y solo se escuchaban los gritos de los invitados, mientras corrían para esconderse de las balas.
El tiroteo lo originó Eudys Rafael Rincón, oficial activo de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), y en respuesta el dueño de la miniteca, quien no está identificado, sacó su arma y le disparó. «Eudys se puso plástico, exigiéndole a la dueña de la casa que acabara con el open, la señora le pagó y él se calmó. Al rato volvió con otros policías y disparó», declaró un testigo a la Policía.
En la línea de fuego quedó atrapado Jimmy Michel Escalona Inciarte (22), recibió un tiro en la cabeza y murió. El oficial, quien estaba de permiso, está herido junto a su hermano Euly José Rincón. A ambos los trasladaron hasta el Hospital General del Sur, permanecen estables.
En venganza, por la muerte de Jimmy, unos motorizaros llegaron a las 5.30 de la mañana hasta la coordinación policial de la PNB de Luis Hurtado Higuera, tocaron la puerta y el oficial Reinol Antonio Espitia Centeno, les abrió. El parrillero sacó un revólver y le disparó en el brazo izquierdo y en la cabeza. El oficial se arrastró por el pavimento hasta el interior de la comandancia. Allí lo auxiliaron sus dos compañeros de guardia.
Uno de ellos reportó la novedad por radio y pidió apoyo. Una comisión se acercó, montaron al herido en la parte de atrás de la patrulla y lo llevaron hasta el hospital. Otro funcionario del cuerpo de seguridad aseguró que al llegar al nosocomio, se toparon con Eudy y su hermano heridos. «Desconozco si los dos hechos tienen relación».
A las afueras de la morgue unos invitados de la fiesta, acompañados de una mujer, le comentaban a la prensa que el policía desde temprano estaba en el open. «Eso no fue un enfrentamiento, el tipo ese mató a Jimmy, porque se la tira de malo».
Los dueños de la casa se negaron a declarar. En la mañana un oficial de la PNB los visitó e ingresó a la vivienda para reconstruir la balacera.
La Policía científica investiga el crimen como una venganza. Esperan capturar al dueño del sonido y continuar con los interrogatorios. «Si los policías estuvieron implicados, todas las armas de los funcionarios adscritos a esa coordinación serán sometidas a un estudio de balística y si sale positivo, caen presos», comentó un funcionario.
Karoline Valladares/La Verdad