En declive las exportaciones de alimentos de EEUU a Cuba

La exportación de productos agrícolas de Estados Unidos hacia Cuba disminuyó un 44 por ciento en lo que va de año pero el gobierno de la isla ha importado más de $3.6 millones en productos médicos, la cifra más alta en la última década, según cifras del U.S.-Cuba Trade and Economic Council. El Nuevo Herald

En agosto, Alimport—la empresa estatal que controla las importaciones y exportaciones de productos agrícolas—compró alrededor de $2 millones en frijoles de soya, comparados con más de $14 millones de alimentos importados en julio.

En lo que va de año, el valor de las exportaciones a Cuba alcanza los $124,695,833 y aunque la cifra podría remontar en el último trimestre, es improbable que alcance los $291,258, 881 que alcanzaron en el 2014.

$124,695,833Monto de las exportaciones de alimentos de EEUU a Cuba en 2015

La tasa descendente en las exportaciones a la isla no puede explicarse solamente por el cese temporal de las compras de pollo congelado debido a un brote de gripe aviar en EEUU, pues las compras de otros productos disminuyeron proporcionalmente. Por ejemplo, el año pasado Cuba importó alrededor de $28 millones en maíz pero este año solo ha comprado unos $4.8 millones.

Según John Kavulich, presidente del U.S.-Cuba Trade and Economic Council—una organización que monitorea el comercio entre ambos países—, el decrecimiento podría deberse no solo a las ventajas crediticias de negociar con entidades de gobiernos aliados sino también a una decisión de las autoridades cubanas de limitar las compras para estimular mayor presión de compañías de Estados Unidos y congresistas para eliminar el embargo.

De acuerdo con un reciente reporte comisionado por los miembros del Congreso, mientras las importaciones agrícolas provenientes de Estados Unidos han ido disminuyendo desde el 2009, las compras de alimentos se han mantenido más o menos estables, ahora con Brasil y la Unión Europea a la cabeza como principales proveedores.

Entre las principales causas de la caída en las exportaciones el reporte cita las regulaciones que limitan el otorgamiento de créditos para estas compras a Cuba así como el posible interés del gobierno cubano en diversificar su red de proveedores o establecer alianzas con aliados como Brasil, China y Vietnam. Dos compañías estatales vietnamitas ofrecieron a Cuba créditos de hasta dos años para pagar el arroz comprado, según reportó Kavulich.

Sin embargo, las ventas de medicinas y otros productos médicos alcanzaron su máximo histórico desde el 2003, cuando Cuba realizó compras por un poco más de $9,000. Estas ventas aumentaron significativamente en el 2006 ($814,866) y en el 2013, cuando superaron los dos millones de dólares. En el 2015, las exportaciones en esta área suman $3,690,531 hasta el 31 de agosto.

Cuba presentó el borrador de una resolución contra el embargo que será votada en Naciones Unidas a fines de este mes, en el que estima afectaciones en el sector de la Salud que ascienden a $2,541 millones. El informe incluye casos de hospitales y centros de investigación que han reportado no poder adquirir medicamentos o instrumental porque son manufacturados en Estados Unidos, pese a que las exportaciones de productos médicos están permitidas.

EEUU vende whisky y tequila a Cuba

Por otra parte, el whisky y el tequila llegaron por primera vez a la lista de los 10 productos más comprados por Cuba, aunque las cifras son modestas en comparación con los importaciones de alimentos.

En lo que va año, Cuba importó unos $61,335 en whisky y bourbon, y otros $13,340 en tequila procedente de Estados Unidos, los cuales probablemente iban dirigidos al turismo y a ventas minoristas, con los paladares como destino final.

Los dueños de estos negocios no tienen personalidad jurídica para importar o exportar y tampoco existe un mercado mayorista, por lo que deben comprar sus insumos en las tiendas estatales que venden productos a la población en la moneda convertible de Cuba, el CUC.

Las reformas lentamente implementadas por el gobierno de Raúl Castro para estimular la producción de alimentos aún no han obtenido los resultados esperados y el país continúa importando alrededor del 75 por ciento de lo que consume la población por unos $2,000 millones anuales.