La fuerza creadora: Prakriti Maduro

Su nombre en sánscrito significa naturaleza; fuente de lo creado. Quizás por eso a Prakriti Maduro no le cuesta retar las condiciones para sembrar una cantidad de proyectos simultáneos en los climas y terrenos más hostiles. Resuelta a sacudirse el desgaste de un repertorio teatral de dramas consecutivos en el último año, entre los que se cuentan Profundo, Traición, Crimen y castigo y su aclamada interpretación de Frida Kahlo, su papel más reciente sobre las tablas fue una novicia en Santo Prepucio, una comedia de microteatro de 1/4. En cine se le vio como la animadora de un certamen en 3 bellezas y actualmente está en cartelera con Carga sellada, coproducción entre México, Venezuela, Bolivia y Francia. Basada en hechos reales, en ella interpreta a la esposa de un investigador que espera desentrañar la desaparición de un tren con desechos tóxicos, que circuló entre Bolivia y Chile en 1994. También participó con Elba Escobar en Extraterrestres, cinta sin estrenar, filmada entre España y Puerto Rico, donde interpreta a una astrónoma.

En este momento está dedicada a organizar y coproducir la primera edición en Caracas de PechaKucha —un formato japonés de exposiciones en las que cada propuesta artística se resume en 20 imágenes que se proyectan durante 20 segundos— y que se celebrará en noviembre. «En este caso, la intención es reunir a 12 o 13 expositores que sean voceros de buenas ideas como aportes al país, para darlas a conocer y obtener apoyo». Entre ellos, su propio proyecto será un crowdfunding para hacer microteatro gratuito dirigido a niños de bajos recursos, con piezas que aludan a valores en peligro de extinción que merecen ser rescatados. «La idea es que ellos aprendan a apreciar el teatro, que tengan acceso a otras formas de cultura. Si se logra que ese mensaje de convivencia cale en al menos un solo niño y que eso contrarreste todo lo que ve en la calle, vale la pena».

Paralelamente, la actriz empezó a estudiar flamenco, pues se prepara para protagonizar una película en México donde encarnará a una profesora de este arte. También cocina un proyecto que combina radio, web y cine y una participación en la próxima cinta de Marcel Rasquin. Continuamente le preguntan por qué no se ha ido del país. «Yo entiendo que la gente se preocupa, pero a mí me gusta vivir aquí, trabajar aquí. Siempre existe la posibilidad de que me vaya un rato, en parte por la oportunidad de ganar en otra moneda. Pero no van a ver una foto de mis pies en el Cruz-Diez del aeropuerto diciendo: ‘Venezuela, espero que mejores para volver’… Mi trabajo está aquí, así que voy y vengo. A pesar de la situación, este es un país en el que todavía hay potencial para hacer. La remuneración económica es menor y todo es más difícil, pero de hacer, aún se puede; hay que ser ingenioso. Hay gente que todavía está proponiendo cosas nuevas».

En Twitter: @PrakritiMaduro.

 

Magaly Rodríguez/Todo en Domingo/El Nacional