Este 27 de octubre se cumplió un año desde que el multimillonario Elon Musk compró la red social Twitter, ahora rebautizada como X. Con constantes actualizaciones, cambios de política y en busca de una “aplicación para todo”, el también dueño de Tesla ha provocado controversia a nivel mundial. Algunos consideran que la ‘App’ ha mejorado; otros creen que se ha hecho más «tóxica» y «menos útil».
“El pájaro azul ha sido liberado”, publicaba un 27 de octubre de 2022 el multimillonario Elon Musk. Minutos antes había concretado oficialmente la compra de Twitter por 44.000 millones de dólares. Un año ha pasado desde esa compra y la red social, ahora conocida como X, no está libre de controversias por las políticas que Musk decidió implementar.
Una de las primeras polémicas fue la restitución de la cuenta del expresidente estadounidense Donald Trump tras los sucesos que derivaron en la toma del Capitolio en enero de 2021. Musk dijo que, bajo su poder, reinaría la libertad de expresión.
Inició con un despido de una gran mayoría de los empleados de Twitter y las modificaciones iniciaron. Entre ella, la insignia azul de una cuenta verificada. Para obtenerla, el perfil debía cumplir ciertos requisitos y atravesaba un estudio por parte de la plataforma. Ahora, Musk introdujo un sistema de pago en el que cualquiera puede tener una cuenta verificada si desembolsa la suma que pide para ello la compañía.
Para diciembre de 2022 oficialmente se presentó el servicio de una suscripción, Twitter Blue, que permite a los usuarios que lo adquirieron tener publicaciones de hasta 4.000 caracteres y videos de hasta 60 minutos.
En julio de 2023 llegó el cambio de imagen. El pájaro azul ha muerto y la X, una obsesión del magnate que tiene dicha letra o símbolo en todo su giro de negocio (SpaceX, Tesla modelo X), se convirtió en el nuevo ícono de la plataforma. De a poco, retiró las palabras de tuit y retuit y optó por publicar, republicar.
“Me llevará un tiempo decir: ‘Estoy saltando a X’”, dijo la usuaria Carrington Whigham, que ha utilizado la aplicación desde 2010. “Tal vez necesite reducir el tiempo en Twitter y simplemente observar cómo se desarrolla lo que se supone que es, para considerarlo bueno o malo para mí”, agregó.
Sin embargo, otras personas decidieron alejarse de la aplicación por las políticas y la visión de Musk para X. Incluso, ha desanimado a los anunciantes, restando al sitio su fortaleza frente a nuevos rivales, como Threads, la aplicación de Meta que compite con X.
“No hemos visto morir a X, pero sí la hemos visto degenerar, deteriorarse y volverse más tóxica y menos valiosa, menos útil”, dijo el estratega y comentarista de medios sociales, Matt Navarra, a Euronews Next.
Cifras de X, ¿en picada?
La empresa de análisis web ‘SimilarWeb’ dijo que el tráfico de Twitter ha experimentado una disminución general, incluso en ausencia de Threads.
Según datos obtenidos por ‘The Washington Post’, la empresa X “está sufriendo una hemorragia de anunciantes e ingresos”. Por ejemplo, ha caído un 30 % el número de personas que tuitean activamente.
De acuerdo al diario español ‘El Confidencial’ “el valor de la empresa oscila entre los 4.000 y los 5.000 millones de dólares”, frente a los 44.000 millones de dólares que pagó Musk por ella, lo que representa un 90 % menos.
Esto, debido a que muchos anunciantes, que estaban enganchados con la marca Twitter, decidieron irse tras los cambios en la empresa. El medio reporta que, en este tiempo, X ha perdido cerca de 13 millones de usuarios.
De acuerdo a un informe de la plataforma Statista, Twitter tuvo, en 2021, 362,4 millones de usuarios mensuales activos a nivel mundial. Para 2022, asciende a 368,4 millones, pero para 2023 baja a 352,9 millones y, según las proyecciones que realiza, en 2024 se mantendrá en un número similar.
En su estudio, alertan que desde la adquisición de la red social por parte de Musk y las polémicas medidas aplicadas “podrían frenar en seco las expectativas de crecimiento”.
¿Incrementaron las ‘fake news’?
El diario ‘Le Monde’ publicó un artículo, firmado por 28 periodistas, investigadores y universitarios e impulsores de la tendencia #NoTwitterDay. El documento denuncia que la gestión de Musk es “un peligro para la democracia”.
“Al final, la situación parece empeorar mes a mes. Cada vez más usuarios encuentran el entorno de Twitter extremadamente tóxico, hasta el punto de que deciden dejar de utilizar la plataforma y dirigirse a otras. La desinformación y los contenidos ilegales en general siguen propagándose”, dice el artículo.
Lo que piden es que Musk y su equipo cooperen con la Comisión Europea y Thierry Breton, comisionado europeo de Agenda Digital, quien envió una carta urgente por la desinformación que se comparte en esta red sobre el conflicto entre Israel y Hamás.
“Tenemos indicios de que su plataforma está siendo utilizada para difundir contenidos ilegales y desinformación en la Unión Europea”, escribió Breton, al pedirle mayor transparencia “sobre qué contenidos están permitidos bajo sus términos y aplicar de forma coherente y diligente sus propias políticas”. El documento también pide que tome medidas para mitigar la desinformación y que atienda lo antes posible a estos requerimientos. Caso contrario, Breton advirtió que podría imponer sanciones. La respuesta de Musk no tardó: “Enumere las violaciones a las que alude en X , para que el público pueda verlas”.
Following the terrorist attacks by Hamas against 🇮🇱, we have indications of X/Twitter being used to disseminate illegal content & disinformation in the EU.
Urgent letter to @elonmusk on #DSA obligations ⤵️ pic.twitter.com/avMm1LHq54
— Thierry Breton (@ThierryBreton) October 10, 2023
A nivel mundial, se ha lanzado otro pedido. En medio de un asedio total de Israel a la Franja de Gaza, el Internet en el enclave se encuentra caído en medio de bombardeos, lo que dificulta la comunicación de los habitantes del enclave con los suyos en el exterior, así como el trabajo de los periodistas y de otras profesiones.
#StarlinkforGaza (Starlink para Gaza) es la tendencia que ha marcado la plataforma en las últimas horas. Musk también es propietario de Starlink, un servicio de Internet satelital. Por lo que el pedido mundial ha sido para que el magnate lo proporcione en Gaza. Sin embargo, Musk no emitido ninguna respuesta, pese a que suele ser muy activo en su propia red. AFP