Nitu Pérez Osuna: La FAN y el artículo 328

La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela dice en su artículo 328 que “La Fuerza Armada Nacional constituye una institución esencialmente profesional, sin militancia política, organizada por el Estado para garantizar la independencia y soberanía de la Nación y asegurar la integridad del espacio geográfico, mediante la defensa militar, la cooperación en el mantenimiento del orden interno y la participación activa en el desarrollo nacional, de acuerdo con esta Constitución y con la ley.

En el cumplimiento de sus funciones, está al servicio exclusivo de la Nación y en ningún caso al de persona o parcialidad política alguna. Sus pilares fundamentales son la disciplina, la obediencia y la subordinación. La Fuerza Armada Nacional está integrada por el Ejército, la Armada, la Aviación y la Guardia Nacional, que funcionan de manera integral dentro del marco de su competencia para el cumplimiento de su misión, con un régimen de seguridad social integral propio, según lo establezca su respectiva ley orgánica”.

 


He querido comenzar esta columna transcribiendo en su totalidad el artículo de la Constitución que habla de la misión y visión de las Fuerza Armada Nacional de Venezuela. Y lo hago porque según una encuesta realizada por FF.AA.NN.TODAY, entre el 15 de Septiembre y hasta el 15 de Octubre del presente año, a “personal militar en situación de actividad y miembros de la reserva activa a nivel nacional”, el 91% de los encuestados afirma que “la actual FAN no puede cumplir con las misiones derivadas” del citado artículo. Reconocen entonces, que todo lo que se ha hecho con la institución militar es inconstitucional… tanto así, que hasta el nombre se lo cambiaron.

Pero la cosa no termina ahí,  para el 88% de los consultados, “el actual liderazgo militar de la FAN no tienen autoridad moral para exigir los valores de la disciplina, obediencia y subordinación” y el 87% considera que “la participación activa de la FAN en política afecta la unidad organizacional”.

La encuesta nos ofrece revelaciones aún más interesantes: el 88% del personal que participó en el sondeo afirma “que el concepto de fusión cívico militar afecta a la institución”. Una puede pensar, al leer este resultado, que los militares venezolanos mantienen arraigado aún  la visión de subordinación al poder ciudadano y su misión es estar “al servicio  exclusivo de la Nación y en ningún caso al de persona o parcialidad política alguna”. Es decir, para la mayoría de los profesionales de la FUERZA ARMADA NACIONAL aún está sembrada una conciencia democrática y constitucional en el cumplimiento de las normas que garanticen los derechos humanos y los convenios internacionales a los que está suscrita Venezuela.

Esta indagación, que a todas luces anuncia el desastre de la actual política militar,  remata con los siguientes datos: el 91% cree que las imputaciones públicas de miembros de la FAN con el narcotráfico y el 89% en casos de corrupción “afectan a la organización castrense, es más, el 96 % de los encuestados “cree que las decisiones de Generales y Almirantes no son soberanas”.

Para el 92% de los consultados, el reclamo del Esequibo  es justo.  Es decir, amigo lector, la demanda que hemos hecho los venezolanos desde el siglo pasado a través del Acuerdo de Ginebra, en cuanto a que el Esequibo es una zona en reclamación,  tiene eco en la FAN.

Este estudio de opinión revela que las amenazas de Maduro de “ganar como sea” o gobernar fuera de las instituciones, no son sino eso, amenazas, pataletas o pretendidas imposiciones de quién perdió el apoyo cívico y parece… que el militar también .

Por qué  llego a esta conclusión? Porque el 92% de quienes respondieron a esta consulta dicen “no tener disposición ni voluntad de cumplir órdenes inconstitucionales y violatorias de los derechos humanos”.

Amén.