Lo que hay detrás de las acusaciones contra Centauro y Cocuy

Recientemente ha circulado en redes una ola de rumores sobre personas fallecidas por ingerir licores artesanales como Centauro y Cocuy, ninguno por las marcas comerciales reconocidas

Para el dirigente social Lenin Aquino “Una pelea de los rones venezolanos por el mercado ha llevado a satanizar el cocuy: bebida ancestral de los pueblos autóctonos”.

“La muerte reciente de personas por ingesta excesiva de bebidas alcohólicas se la han atribuido a los rones de fabricación artesanal”, asegura Aquino.

En la página Terminoticias Aquino asegura que “Durante los gobiernos de Gómez y Pérez Jiménez fue perseguida la fabricación artesanal para favorecer a los importadores».

La guerra de los precios 

El incremento de los precios en el licor este dirigente lo explica así: “altos precios del whisky, vodka, vino, champaña y otras bebidas importadas han volcado a los consumidores a buscar las marcas nacionales”

“Ello ha hecho subir los precios de los buenos rones venezolanos como Pampero, Cacique, Santa Teresa. A tal punto que el ron Centauro llevó la peor parte en la pelea por el mercado venezolano”, detalló Aquino.

El Ron Centauro ha denunciado una “campaña sucia” contra esta empresa ubicada en Turmero. Manifestaron tener más de 15 años en el mercado y haber hecho las pruebas necesarias a su bebida,no hay ningún elemento prohibido en su producto.

Centauro y Cocuy han sido señalados en redes sociales de ser responsables de supuestos fallecimientos.La campaña afecta a estos productores artesanales.La gran pregunta es ¿quién sale favorecido con esto?

Lenin Aquino afirma que productores artesanales de cocuy de Lara plantean “la necesidad del apoyo del gobierno nacional. Con la intención de favorecer la regularización de la producción artesanal e industrial del cocuy”.

Finalmente este expone que “El mercado nacional es grande y las marcas reconocidas de rones venezolanos exportan.  Lo que sin duda deja un espacio para que lo llenen los productores pequeños y artesanales”.