Pedro Sánchez insta a la reconciliación en Bosnia al conmemorar Srebrenica

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha enviado este sábado un «mensaje de reconciliación» a la ceremonia de homenaje a las víctimas del genocidio de Srebrenica, en el que expresa el apoyo de España a la integración de Bosnia-Herzegovina en la Unión Europea (UE).

«La reconciliación es el germen y la clave del proyecto europeo, de sus principios y también de sus valores fundamentales, de una Unión Europea de la que ese país (Bosnia-Herzegovina) espera legítimamente a ser parte y cuya aspiración mi país apoya fervientemente», declaró Sánchez.

En su participación telemática (por vídeo) en la conmemoración celebrada en el Centro memorial de Potocari, donde reposan las víctimas, y televisada en directo, el mandatario español aludió a la matanza de Srebrenica hace un cuarto de siglo como «la tragedia más oscura y abominable en Europa después de la Segunda Guerra Mundial».

Con este motivo, envió un «mensaje de reconciliación, de solidaridad, de concordia y de esperanza».

«Esta Europa solidaria de hoy nació de las cenizas del mayor y el más doloroso conflicto, del momento más oscuro de nuestro continente, y con la reconciliación y la solidaridad de enemigos históricos. Este es mi mensaje», dijo Sánchez.

Apoyo a la reconciliación en Bosnia-Herzegovina

«Redoblemos nuestros esfuerzos para que la reconciliación en Bosnia-Herzegovina se convierta en una realidad sobre la que aceptar y reforzar el gran proyecto común de su país, la integración en la UE para que las aspiraciones de sus ciudadanos se vean cumplidas, para que podamos hablar de ciudadanos y personas sin fronteras», añadió.

El jefe de Gobierno recalcó la importancia de las condenas pronunciadas por los tribunales internacionales contra los responsables del genocidio cometido el 11 de julio de 1995.

Para Sánchez, este día de dolor recuerda también la importancia de la paz lograda ese mismo año, pero también su fragilidad y la necesidad de protegerla.

En este contexto, pidió a los líderes políticos y religiosos bosnios reconocer el dolor del otro.

Al aludir a los conflictos pasados de España, aseguró que el discurso revisionista e incendiario nunca tendrá su eco en su país, que defiende la verdad y solidaridad con las víctimas, recordando su propia experiencia.

La matanza de más de 8.000 varones musulmanes se produjo tras la conquista de Srebrenica por parte de las tropas serbobosnias bajo el mando del general Ratko Mladic, hoy condenado por genocidio y otros crímenes de guerra.

El conflicto enfrentó entre 1992 y 1995 en Bosnia-Herzegovina a musulmanes, serbios y croatas, y el enclave oriental de Srebrenica era entonces zona protegida de la ONU.

El centro conmemorativo de Potocari alberga los restos de 6.643 personas. Sus cadáveres fueron exhumados en diferentes fosas comunes en el este bosnio.

Hoy reciben sepultura otras nueve víctimas identificadas de la matanza. EFE