Alarma en Florida por desperdicio de miles de vacunas contra la Covid-19

Las autoridades de salud de la Florida han desperdiciado más de 3,000 dosis de vacunas contra el COVID-19, dijo el miércoles el portavoz del Departamento de Salud.

Hasta el miércoles, 3,344 dosis se echaron a perder o se quedaron sin usar después de haberse descongelado, escribió en un correo electrónico Jason Mahon, portavoz del departamento.

El total es alto en momentos en que los floridanos siguen luchando con la pandemia y esperan la oportunidad de ser inmunizados con la vacuna. Sin embargo, el estado ha recibido más de tres millones de dosis del gobierno federal, y los funcionarios reportaron un desperdicio de una de cada 1,000 dosis.

Hasta el miércoles, la Florida había entregado más de 1.6 millones de dosis, según datos de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).

Esto quiere decir que se ha desperdiciado solo cerca de un 0.2 por ciento del número de vacunas que se han entregado a los floridanos.

“El departamento le pide a los centros de salud, y a los que se encargan de administrar la vacuna que hagan todo lo posible para cerciorarse de que ninguna dosis se desperdicie o se deseche”, dijo Mahon en un correo electrónico.

Se desconoce cómo la Florida se compara con otros estados en su tasa de desperdicio. Los CDC no publican estadísticas del desperdicio en su pizarra nacional de vacunación, aunque exigen que los estados reporten cualquier vacuna desperdiciada a la agencia federal.

A pesar de esta exigencia, ProPublica reportó a principios de este mes que algunos estados no siguen de manera rigurosa el rastro del desperdicio. Las autoridades de salud de Indiana, por ejemplo, sencillamente le dijeron a la publicación que el desperdicio había sido “mínimo”.

Sin embargo, las autoridades de salud de Pennsylvania fueron más precisas cuando le dijeron a ProPublica que el estado había desperdiciado 0.1 por ciento de las dosis de la vacuna que recibieron del gobierno federal hasta el 11 de enero. Esa cifra es coherente con el conteo de la Florida sobre el desperdicio de las vacunas.

El esfuerzo por vacunar a los floridanos contra el coronavirus es el plan de vacunación más ambicioso jamás emprendido en la historia de Estados Unidos. Los gobiernos federal y estatal deben coordinar el transporte seguro de millones de vacunas todos los meses.

De las vacunas que en la actualidad están disponibles, una fue diseñada por Moderna y la otra mediante un proyecto conjunto entre Pfizer y BioNTech, lo que ha ce que sea más difícil de distribuirlas en parte porque deben estar congeladas mientras estén almacenadas. La vacuna de Pfizer tiene que mantenerse a menos de 94 grados Fahrenheit (34° C), en tanto la de Moderna se almacena a menos cuatro grados Fahrenheit (-20° C). Los pacientes tienen que vacunarse dos veces con semanas de diferencia entre una y otra, lo que le agrega aun más retos logísticos a las autoridades de salud.

Después de más de un mes en los trabajos de vacunación, la Florida ha reportado haber administrado al menos una dosis a cerca del 6.8 por ciento de su población, lo que coloca al estado en el puesto 10 per capita entre los 50 estados del país.