Sin compasión mata a golpes a su hija

Una joven de etnia wayuu se descargó con furia y locura contra su hija de apenas tres años. La noche del pasado miércoles, los vecinos del barrio La Arreaga no pudieron evitar escuchar los gritos de dolor que salían de la boca de Jhoana Carolina Montiel Montiel, que se percibían sin esfuerzo, cuando su progenitora, Yoliber del Carmen Montiel Montiel, de 23 años, la golpeó hasta dejarla sin vida dentro de su casa, sin razón aparente.

Edwin Aldrin Charry/La Verdad

Dilia Ferrer, madre de la pareja de Yoliber, comentó que no estaba en su casa cuando ocurrió el hecho. Agregó que su hijo, Gustavo Adolfo Ferrer, de 26 años, llegó a la vivienda, a las 9.00 de la noche del pasado miércoles, en la calle 26, del barrio La Arteaga, en la parroquia Cristo de Aranza, del municipio marabino. Al adentrarse en su morada, se percató del cuerpo de la niña tirada en el suelo. Inmediatamente corrió hacia ella para verificar que todo estaba bien, mas al tocarla e intentar moverla, vio que no respondía. Se dirigió con rapidez hacia la habitación donde se encontraba Yoliber del Carmen, la despertó y le informó de lo ocurrido. Yoliber solo se limitó a mirarlo y decirle que le dolía la cabeza. Pasados los minutos, la progenitora de la infante procedió a llamar a la mamá de su pareja, para intentar convencerla de que la llevara ella al hospital, pero no tuvo éxito.

Yoliber del Carmen Montiel se dirigió con su niña aparentemente desmayada, y con la hermana de Gustavo hacia el Hospital Chiquinquirá de Maracaibo. La bebé murió a los minutos de ser internada en el centro hospitalario.

Según un funcionario de la Policía científica ligado a la investigación del caso, la niña presentó hematomas, mordeduras y escoriaciones en varias zonas de su cuerpo. Tenía un fuerte golpe en la cabeza, del que le quedó una herida abierta, visible al llevar rapada su cabeza. El cuerpo de Jhoana lo trasladaron a la morgue forense de La Universidad del Zulia, donde se le practicó la autopsia de ley para esclarecer las verdaderas razones por las que la niña llegó a la muerte.

Funcionarios de la Policía científica llegaron hasta el hospital para llevarse detenida a Yoliber del Carmen, y a la hermana de su pareja, a quien había pedido que la acompañara a llevar a la niña por si surgía algún imprevisto. Comentó ante los funcionarios, que la había mordido porque no tenía qué comer. Luego de realizar la entrevista a las mujeres, los uniformados deciden liberar a la cuñada de Yoliber, a la 1.00 de la madrugada de ayer, al constatar de que ella no tenía nada que ver con el asesinato de la bebé Jhoana Montiel. Caminó hasta la estación del Metro de Maracaibo en El Varillal, donde le pidió el teléfono a un vigilante de un local comercial para llamar a su madre y contarle lo sucedido. Posteriormente detuvieron a Gustavo Adolfo Ferrer.

Daniela Montiel, hermana de Yoliber, comentó que la niña nunca recibió los cuidados de su progenitora. Contó que a los 45 días de haber nacido, Yoliber le deja a ella la niña para que la cuidara y se hiciera cargo de ella. Desde ese momento, la niña se pasó a ser más su hija que su sobrina.

«Ella vivió con nosotros prácticamente toda su corta vida, de vez en cuando iba y la visitaba allá en el Moján, a donde vivimos, pero nunca la trató como trataba a sus otros hijos».

Tres semanas de dolor y sufrimiento

La dura vida de la niña comenzó hace tres semanas, cuando Yoliber del Carmen se apareció en casa de su hermana Daniela, en El Moján, con la excusa de que se llevaría a la niña para comprarle ropa, y cuidar de ella. Su hermana, acepta su petición, y se la entrega. Agregó que su madre le cocinaba comida para la niña, y dejó de hacerlo porque descubrió que Yoliber se la comía.

«Ella maltrataba mucho a Jhoana desde que se la llevó. Le pegaba por cualquier cosa, hasta por cualquier cosa, pareciera que no le interesara ella o no sé»

Yoliber del Carmen está embarazada de Gustavo Adolfo, con quien ya tiene una hija de un año. Tiene además, un hijo de cinco años de otro hombre que al igual que el padre de Jhoana, la dejó al embarazarla.