Macri, entre la desconfianza del mercado y el desencanto de la sociedad

Macri

El presidente de Argentina, Mauricio Macri, atraviesa por su peor momento, con una crisis económica que intenta capear con apoyo del FMI, pero que ha erosionado su imagen en una sociedad que lo recibió hace casi tres años con un alto nivel de expectativas.

Estos han sido los peores cinco meses de mi vida“, dijo Macri la semana pasada, en referencia a este periodo en que la moneda sufrió una acelerada depreciación, atizada por la desconfianza de los mercados, que dio al traste con sus proyecciones de crecimiento económico y de índice de inflación.

En lo que va de 2018, el peso argentino ha perdido cerca de 50% de su valor frente al dólar, la proyección de inflación pasó de 15% a 40% anual y la perspectiva de crecimiento de 3,5% del PIB a -1%.

A la par del deterioro en las cifras económicas, corre el desgaste en los índices de aceptación de Macri a un año de las presidenciales en las que puede optar por la reelección.

Según la encuesta de satisfacción política y opinión pública de la Universidad de San Andrés, la aprobación del gobierno de Macri cayó en agosto a 34%, desde el pico de 66% que registró en octubre pasado cuando su coalición Cambiemos ganó las elecciones parlamentarias de medio término, aunque sin alcanzar la mayoría.

La aprobación sigue cediendo y el efecto ‘luna de miel’ se perdió en absoluto“, apuntó ese sondeo.

Para Pablo Knopoff, director de la consultora Isonomía, la elección de Macri, un exitoso empresario de derecha que había sido alcalde de Buenos Aires, “despertó una expectativa altísima y por eso la erosión es muy veloz”.

– A la espera –

Esta semana, Macri tiene el desafío de acordar con los gobernadores, la mayoría de ellos opositores, el presupuesto para 2019 en el que se propone lograr el equilibrio fiscal y que deberá someter al Congreso de mayoría opositora.

También se espera que cierre la renegociación con el FMI, para que Argentina pueda recibir anticipadamente recursos que estaban previstos para 2019 y 2020 del paquete total de 50.000 millones de dólares.

Todo esto en medio de una creciente conflictividad social, con manifestaciones cotidianas de diversos sectores y una convocatoria a huelga general para el próximo 25 de septiembre.

Macri todavía tiene tiempo, porque la sociedad se lo da, pero cada vez hay menos paciencia. La sociedad no quiere que esto explote, quiere que se solucione“, comentó Knopoff.

El analista Rosendo Fraga advierte de su lado que septiembre será “un mes difícil en términos de protesta social”, pero destacó que el gobierno ha logrado evitar que éstas se activen en el poderoso sector rural, sobre el que acaba de imponer nuevos tributos a la exportación.

En el ámbito internacional, Macri cuenta con el respaldo explícito del presidente estadounidense, Donald Trump, quien consideró que “está haciendo un excelente trabajo“, y de la directora gerente del FMI, Christine Lagarde.

Sin embargo, un informe de la firma Capital Economics resaltó que la falta de otras medidas fiscales más fuertes “sugieren que Macri lucha por conservar su capital político”.

En la actual situación resulta difícil imaginar que la popularidad de Macri entre el electorado pueda hacer otra cosa que disminuir“, señaló Capital Economics.

– Cede la polarización –

Además de la expectativa de cambio que generó su llegada al poder, a Macri lo ha ayudado a lo largo de estos casi tres años la división de la oposición en la que no se atisba a un líder claro que amenace su reelección.

Con el deterioro económico va perdiendo fuerza la polarización entre Macri y su antecesora, Cristina Kirchner, del peronismo de centroizquierda, a cuya gestión atribuye el gobierno muchos de los males actuales.

“La herencia”, como se refieren los argentinos al elevado déficit fiscal y otras variables que dejó el gobierno Kirchner, sirve aún al gobierno para explicar sus dificultades
, pero cada vez menos, advirtió Knopoff.

“La gente ahora se dice: entendemos el peso de la herencia, pero es hora de que Macri haga algo”, explicó.

Y allí se abre un escenario diferente y hasta ahora impensado. “Si esto empeora mucho el argentino va a buscar una alternativa, un ‘outsider’, pero siempre dentro de la política”, vaticinó Knopoff de cara a las elecciones de 2019.

Con información de AFP