Un equipo del Fondo Monetario Internacional (FMI) llegará este miércoles a Buenos Aires para realizar la cuarta revisión del plan económico firmado con Argentina en 2018, que respalda un préstamo de 56.300 millones de dólares por tres años, confirmaron a Efe fuentes del organismo.
Encabezada por el economista Roberto Cardarelli, la misión mantendrá reuniones privadas con funcionarios del Gobierno de Mauricio Macri y el Banco Central, pero también, como es habitual en estas visitas, con representantes del sector privado, la educación y la sociedad civil.
En caso de que el organismo dé el visto bueno, se realizará un nuevo desembolso del rescate otorgado a Argentina el año pasado.
Se trata de la cuarta vez que el FMI revisa el cumplimiento del acuerdo suscrito en mayo de 2018, cuando una fuerte caída de la moneda argentina llevó al Gobierno de Mauricio Macri a solicitar ayuda con un programa que preveía un crédito en tramos hasta 2020.
El préstamo es del tipo “Stand-By”, que requiere de una fuerte intervención de la institución multilateral en las políticas económicas nacionales.
La ultima revisión, que culminó con la autorización por parte del Directorio del FMI a desembolsar 10.870 millones de dólares, fue en febrero pasado, una agenda que incluyó encuentros con dirigentes de la oposición, sindicatos y empresarios.
A mediados de marzo, Cardarelli advirtió que era necesaria “una mayor restricción en el gasto gubernamental”.
“Elogiamos los esfuerzos de las autoridades y la firme determinación de abordar los desequilibrios macroeconómicos y promover su plan de estabilización económica”, afirmó el jefe de la misión y destacó que los altos déficit fiscales y externos, los dos desequilibrios al centro de la crisis financiera de 2018, se encontraban “en medio de una corrección significativa”.
El economista afirmó que “la inflación mensual” sigue siendo alta -en marzo llegó el 54,7 % interanual-, por lo que romper la inercia inflacionaria “será un proceso largo que requerirá persistencia y coherencia”.
El acuerdo con el FMI incluye un compromiso de alcanzar el equilibrio fiscal primario este año, es decir, el equilibrio de las cuentas públicas antes del pago de intereses.
En el equipo que viaja de Washington estará también Alejandro Werner, director del Departamento del Hemisferio Occidental del FMI.
Esta nueva visita se da en medio del clima electoral por las elecciones presidenciales de octubre próximo y con una situación marcada por los malos números estadísticos del país, que entró en recesión en el segundo trimestre de 2018.
También por la falta de confianza de los mercados financieros, que se refleja en una alta prima de riesgo y en la constante caída del peso.
Por esta razón, el presidente Mauricio Macri invitó este lunes a los líderes de la oposición, del empresariado, de los sindicatos y la Iglesia a llegar a un acuerdo con 10 puntos “imprescindibles” para “despejar dudas” sobre el país, ya que el Ejecutivo cree que los inversores dudan del rumbo que pueda tomar la economía tras los comicios.
Entre otras cuestiones, el decálogo se refiere al pago de la alta deuda externa, incluido el préstamo del Fondo Monetario Internacional, por lo que insta a lograr un compromiso con el “cumplimiento de las obligaciones” con los acreedores.