Lo que alarmó a los directivos fue que esta práctica, aparentemente inofensiva, refleja una problemática directamente relacionada con el acoso escolar
Empezó a mediados de abril. Algunos alumnos del IES Astures de Lugones, una escuela secundaria ubicada cerca de la ciudad de Oviedo, en el principado de Asturias, comenzaron a llegar a las clases con heridas extrañas en manos y muñecas.
Los profesores del centro educativo, que tiene inscritos a 165 alumnos en primero de secundaria –curso en el que se presentaron más casos (40)-, interrogaron a los adolescentes para tratar de descubrir el origen de aquellas marcas.
En realidad todo se trataba de un juego infantil que ha sido duramente cuestionado por adultos y autoridades. La práctica es conocida como «El abecedario del diablo» , «abecedario chino» o simplemente «El abecedario», y consiste en que un niño le rasca el dorso de la mano a otro mientras este recita las letras del alfabeto de la A a la Z y dice una palabra que comienza con cada una de ellas.
«Empezamos a ver sospechosamente que algunos niños venían con heridas en las manos. Un caso podía ser fortuito, pero cuando vimos que se empezaba a extender fue cuando decidimos coger a unos niños para que nos dijeran a qué se debían esas marcas y fue cuando nos explicaron qué era ese juego», dijo el director del colegio Mario Prendes.
Lo que alarmó a los directivos fue que esta práctica, aparentemente inofensiva, refleja una problemática directamente relacionada con el acoso escolar. «Es un problema serio. Hay un alumno líder que, para mantener su posición como tal, elige a las víctimas entre los más débiles para resistirse», explicó Mario Prendes.
En el caso particular del colegio asturiano, fueron cuatro alumnos los catalogados con «heridas de consideración»; supuestamente uno de ellos incluso presentó una leve infección.
Las alertas en el plantel escalaron a tal punto que las autoridades determinaron expulsar a cualquier alumno que llegara con este tipo de heridas en las manos. La decisión causó cierta polémica porque, según el testimonio de los estudiantes, algunos eran literalmente obligados a participar en el juego.
Los directivos también temen que, mediante la viralización del reto, esta práctica se extienda hacia otras regiones de España, pues como es sabido no es una dinámica que se haya inventado recientemente. Pero su reaparición podría volver a ponerla de moda.
La Asociación Contra el Acoso Escolar (ACAE) del país europeo ya alertó a padres y maestros sobre la popularización de esta peligrosa práctica, para que se detecte a tiempo y se pueda erradicar.
De acuerdo con el periódico La Voz de Asturias, «El abecedario del diablo» no es el único juego que se extiende por los centros escolares. Otra práctica llamada cutting consiste en hacer marcas con un cutter en puntos estratégicos de las muñecas o los pies y subir la foto a Instagram con un mensaje de victoria: «Reto conseguido«, reseña Infobae