Las principales instancias de la comunidad internacional han lamentado este domingo que el candidato opositor venezolano Edmundo González Urrutia se haya visto forzado a solicitar asilo a España luego de semanas de presión y amenazas de encarcelamiento que lo llevaron a resguardarse en la Embajada de Países Bajos en Caracas. “Su salida de Venezuela es el resultado directo de las medidas antidemocráticas que Nicolás Maduro ha desatado contra el pueblo venezolano, también contra González Urrutia y otros líderes de la oposición, desde las elecciones”, ha manifestado en un comunicado el secretario de Estado, Antony Blinken. “El 28 de julio, el pueblo venezolano expresó de manera abrumadora e inequívoca su deseo de cambio democrático. Apoyamos a González Urrutia en su llamado a continuar la lucha por la libertad y la restauración de la democracia en Venezuela”, prosigue la nota, que condena rotundamente “la decisión de Maduro de utilizar la represión y la intimidación para aferrarse al poder mediante la fuerza bruta en lugar de reconocer su derrota en las urnas”.
por El País de España | Florantonia Singer
“En una democracia, ningún líder político debe verse forzado a buscar asilo en otro país”, ha manifestado el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell. “Hoy es un día triste para la democracia en Venezuela”, indicó Borrell en una declaración con motivo de la salida al exilio en España de González Urrutia debido a “la represión, persecución política y amenazas directas contra su seguridad y libertad”. El jefe de la diplomacia europea recordó que González, “de acuerdo con las copias de las actas públicamente disponibles, sería el candidato presidencial ganador de las elecciones por una mayoría amplia”.
Pese a lo que dicen esas actas oficiales que tiene la oposición, Nicolás Maduro fue proclamado al día siguiente de los comicios por el Consejo Nacional Electoral, que todavía no mostrado los resultados completos. El propio candidato-presidente llevó su supuesta victoria al Tribunal Supremo de Justicia en una maniobra con la que intentaba confirmar la legitimidad de su reelección. Los magistrados dieron su validez, pero hoy todavía no le reconoce gran parte de los países democráticos lo que ha desatado una férrea persecución a la disidencia en Venezuela y el rechazo internacional a la represión. “La UE exige a las autoridades venezolanas poner fin a la represión, las detenciones arbitrarias y el hostigamiento contra los miembros de la oposición y la sociedad civil, así como liberar a todos los presos políticos”, agregó Borrell. “La UE seguirá apoyando al pueblo venezolano en su aspiración democrática”.
El ministro de Asuntos Exteriores neerlandés, Caspar Veldkamp, contó en un comunicado las circunstancias en las que González Urrutia pidió con urgencia hospedaje en la su embajada, días después de las elecciones, cuando informó al país que se mantenía en resguardo. Su última aparición pública fue el 30 de julio, en un acto con sus seguidores frene a la sede la ONU en Caracas. A comienzos de septiembre ya había decidido abandonar la embajada de Países Bajos y también Venezuela. “Le hablé sobre la situación en Venezuela, la importancia del trabajo de la oposición y la transición hacia la democracia, y subrayé nuestra continua hospitalidad. A pesar de todo, manifestó su deseo de marcharse y continuar su lucha desde España”, agregó el funcionario.
Como preámbulo a la salida forzada de González del país, entre el viernes y el sábado las fuerzas de seguridad de Venezuela asediaron la sede de la embajada de Argentina en Caracas—bajo custodia de Brasil— donde se encuentran refugiados desde marzo pasado seis miembros del equipo de colaboradores cercanos de Machado responsables de la campaña electoral y que la Fiscalía ha acusado de terrorismo. Las patrullas rodearon la residencia y también cortaron la electricidad. Por más de 24 horas estuvieron sin servicio. La tensa situación levantó las alarmas ante la posible violación de los acuerdos de inviolabilidad de las sedes diplomáticas.
Desde hace semanas, Maduro y toda la cúpula del chavismo se habían sumado al hostigamiento público de González Urrutia y la líder de las fuerzas opositoras, María Corina Machado. Esta misma semana se había girado una orden de captura en contra del candidato que suplantó a Machado a quien le impidieron competir meses atrás por una inhabilitación judicial. Se le acusaba de cinco delitos entre los que se incluye conspiración, usurpación de funciones y desobediencia a la autoridad por haber publicado en una página web las actas con las que defiende su triunfo. Hace unos días el fiscal Tarek William Saab lo hizo responsable de los daños causados, muertos y heridos ocurridos durante las protestas que siguieron al anuncio de los cuestionados resultados.
La Organización de Estados Americanos también expresó su condena a la persecución, violencia política y amenazas de encarcelamiento que forzaron al exilio al opositor. “Edmundo González hizo solamente lo que correspondía en esta oportunidad, Venezuela definitivamente no necesita ni un solo preso político más, ni un solo torturado más, no necesita ni una víctima más de violaciones sistemáticas de derechos humanos. Sabemos lo que son las cárceles del régimen y sabemos la triste naturaleza humana de la cadena de mando de la represión dictatorial”, señalan en un comunicado en el que reiteran su postura en la que le reconocen como ganador de las elecciones. “En este proceso electoral que no ha terminado, todavía debemos seguir trabajando para que el verdadero ganador de las elecciones del 28 de julio pasado asuma la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela en enero del año que viene” A los señalamientos de Bruselas y la OEA se ha sumado la Cancillería de Chile que también se ha expresado en el mismo tono. El Gobierno de Chile rechaza cualquier forma de represión en contra de los opositores al régimen dictatorial en Venezuela y reitera el llamado a que se respeten los derechos humanos, los derechos fundamentales y la integridad física de los venezolanos”.