Condenado por narcotráfico Genaro García Luna exsecretario de Seguridad de México

El exsecretario de Seguridad de México Genaro García Luna fue declarado culpable este martes por un jurado de Nueva York por cargos de tráfico de cocaína, que le puede llevar a pasar el resto de su vida en la cárcel.

El juez instructor Brian Cogan fue el encargado de leer el veredicto unánime del jurado, al que llegó tras tres días de deliberaciones.

«Culpable», leyó el juez tras enunciar cada uno de los cinco delitos que le imputaba la justicia estadounidense al que fue arquitecto de la guerra contra la droga que México lanzó en el sexenio de Felipe Calderón (2006-2012): participar en empresa criminal continuada, conspiración para distribuir, poseer e importar cocaína y falsedad documental.

Su esposa Cristina Pereyra y sus dos hijos estuvieron presentes en el veredicto que el reo escuchó impertérrito, arropado por su defensa. Después, como ha hecho cada día, se dirigió a su familia, hizo un gesto de abrazo y les mandó un beso.

«Estamos extremadamente decepcionados por el veredicto de hoy», dijo el abogado defensor César Castro tras conocer la decisión del jurado. «La lucha continúa», aseguró.

La sentencia se conocerá el 27 de junio, anunció el juez. La defensa tiene ahora 45 días para apelar el fallo del jurado.

«La justicia ha llegado para quien fuera escudero» de Calderón, escribió en Twitter el vocero presidencial Jesús Ramírez.

Genaro García Luna

Genaro García Luna

«Sí se pudo»

«Sí se pudo», gritaban algunos manifestantes frente al tribunal de Brooklyn tras conocer la sentencia al que fuera «superpolicía» y antiguo director de la agencia Federal de Investigaciones (AFI).

Gloria (no quiso dar su apellido), una mexicana de Puebla de 53 años, estaba exultante. «Es el principio de la justicia», dijo a la AFP. «García Luna no está solo» y apuntó a «Calderón y (Vicente) Fox» (2000-2006) en la trama corrupta.

Este ingeniero mecánico de 54 años, el exfuncionario mexicano de más alto rango que se sienta en el banquillo de la justicia estadounidense, estaba acusado de proteger al cartel de Sinaloa de Joaquín Chapo Guzmán a cambio de millonarios sobornos para enviar droga a Estados Unidos desde 2001 a 2012.

Entre los cargos, se le imputó haber colaborado en seis cargamentos de droga que entre todos sumaban 53 toneladas, entre 2002 y 2008. Para el jurado, dichas acusaciones han sido probadas más allá de la duda razonable en el juicio, que ha durado la mitad del tiempo previsto.

«Traidor»

«García Luna, que una vez estuvo en la cúspide de la aplicación de la ley en México, vivirá ahora el resto de sus días habiendo sido revelado como traidor a su país y a los miembros honestos de las fuerzas de seguridad que arriesgaron sus vidas para desmantelar los cárteles de la droga», dijo el fiscal del Tribunal de Brooklyn Breon Peace.

Para el Ministerio Público, el zar antidroga mexicano fue «socio criminal» del cartel de Sinaloa, mientras que para la defensa fue la «cara de la guerra» que libró contra el narcotráfico en el sexenio de Felipe Calderón (2006-2012).

Varios de los testigos, antiguos miembros prominentes del cartel de Sinaloa, como Jesús «Rey» Zambada, Sergio Villarreal «El Grande» u Óscar «Lobo» Valencia -que colaboran con la justicia estadounidense a cambio de reducir sus penas-, aseguraron durante el juicio que habían pagado millones de dólares al acusado a cambio de protección.

Según la suma que ofrecieron, García Luna y sus acólitos habrían recibido al menos 270 millones de dólares en sobornos.

Sin la colaboración al «más alto nivel del gobierno mexicano», la «operación multimillonaria» del cartel, que se sirvió de trenes, aviones, barcos, contenedores o submarinos para importar toneladas de droga de Sudamérica a través de aeropuertos, puertos o carreteras con destino final a Estados Unidos, «hubiera sido imposible de llevar a cabo», estimó la fiscal Saritha Komatireddy.

García Luna «fue su socio criminal» y por ello «recibió millones de dólares», concluyó.

La defensa que trató de descalificar la fiabilidad de muchos testigos que se han beneficiado de reducción de penas a cambio de colaborar con la justicia, trató de convencer al jurado de que «no ha pruebas de que recibió dinero».

García Luna rehusó declarar en el juicio y en su lugar lo hizo su esposa.

Residente en Estados Unidos desde que salió del gobierno mexicano en 2012, García Luna fue detenido en Dallas (Texas) en diciembre de 2019. Su nombre surgió en el juicio al líder del cartel de Sinaloa Joaquín «Chapo» Guzmán, en 2018.

El gobierno de México, que ha pedido a Estados Unidos su extradición, también reclama 700 millones de dólares presuntamente malversados por el exsecretario de Seguridad Pública. AFP