El Gobierno y parlamentarios oficialistas se reunieron para analizar la posibilidad de terminar con el fuero que protege a los congresistas ante la ley.
«Se debe terminar el fuero porque genera un privilegio a los parlamentarios completamente injustificado y anacrónico», dijo al medio Emol el senador Felipe Kast (centroderecha).
El Gobierno de Chile se encuentra analizando una reforma completa del sistema parlamentario, que incluiría, entre otros aspectos, un eventual el fin de la inmunidad.
El presidente Sebastián Piñera se reunió el 24 de julio con un grupo de senadores para analizar esta medida, y aunque no se ha dado a conocer la postura del Gobierno, algunos parlamentarios oficialistas ya han adelantado su aprobación.
«La inmunidad ha significado muchas veces que varios parlamentarios ni siquiera sesionen en el Congreso y siguen recibiendo su dieta sin ser condenados», dijo Kast al mismo medio.
Asimismo, el senador del partido Renovación Nacional (centroderecha), Andrés Allamand, afirmó que «cuando se instauró la inmunidad parlamentaria había elementos que hoy no están vigentes, es una institución que aparece como un privilegio sin justificación para la ciudadanía».
Algunos también han planteado sus aprehensiones, como el senador democratacristiano (centro), Francisco Huenchumilla, quien afirmó al diario La Tercera que «la inmunidad actúa como una fortaleza frente al ataque de los poderosos, para que podamos tener la libertad para opinar, votar, criticar y fiscalizar sin vernos expuestos a alguien que quiera mandarnos a tribunales».
En Chile el fuero protege a los legisladores que pueden emitir cualquier tipo de declaración en el Congreso mientras estén sesionando.
Se puede acusar penalmente a un parlamentario solicitando en forma previa que la Corte de Apelaciones emita una orden de desafuero.
Esa decisión puede ser revisada por la Corte Suprema de Justicia.