Aunque las cifras siguen evidenciando una caída sostenida en la productividad del sector manufacturero, la industria venezolana mantiene sus esfuerzos por mejorar las condiciones salariales de sus colaboradores.
Así lo afirmó el presidente de Conindustria, Adán Celis, en la que fue su última rueda de prensa como máxima autoridad del ente gremial, y en la que presentó los resultados de la Encuesta Cualitativa de Coyuntura Industrial correspondiente al I trimestre del 2021.
De acuerdo con este estudio que se lleva a cabo trimestralmente, el promedio de remuneración para los trabajadores del sector manufacturero formal se ubica en US$78 para obreros y operadores; en US$172 para profesionales y técnicos y en US$414 para gerentes de empresa.
Este promedio aumenta en el caso de grandes empresas y disminuye considerablemente en la pequeña industria, que sigue siendo, en términos generales, la más afectada por factores como la baja demanda y la escasez de combustible, los cuales lideran la lista entre los que más impactan la producción nacional.
– Operatividad cae por debajo de 20% –
La encuesta mostró que durante el período enero-marzo 2021 el promedio de la utilización de la capacidad instalada fue de 18,4%, como resultado de que el 70% de las empresas encuestadas mantuvieron su capacidad por debajo del 20%.
Solo los subsectores industriales como alimentos, químico-farmacéutico y envases plásticos, priorizados en el contexto de emergencia de la pandemia del COVID-19, presentaron una utilización de su capacidad instalada por encima del 20%.
De esta forma, la capacidad utilizada en la industria encadena 8 años consecutivos en descenso y, en términos reales, la utilización de los factores productivos se ha reducido en 68% desde finales de 2012.
– Falta de combustible incrementa su impacto –
La escasez de diésel continúa siendo un factor crítico que ha impactado negativamente en las actividades productivas y del transporte de mercancías.
Durante el período enero-marzo 2021, la falta de combustible para las operaciones fue el segundo factor que más impactó en la fabricación de productos, solo por detrás de la baja demanda nacional.
De hecho, el 74% de las empresas encuestadas afirma haber pagado a precios no oficiales para la adquisición de ese combustible
Además, se suman los excesivos tributos fiscales y parafiscales y la precariedad de los servicios básicos, factores que afectaron a más del 50% de las empresas durante este trimestre.