El Banco Central de Venezuela retomará a partir del lunes 28 de marzo próximo, las operaciones de absorción de liquidez, a través de la oferta de Títulos de Cobertura, los cuales estarán dirigidos a las instituciones bancarias, personas naturales y a las personas jurídicas privadas, estos dos últimos, a través de los bancos en los que mantienen cuentas abiertas.
Con estas operaciones de mercado abierto (OMA), la autoridad monetaria complementa su estrategia de control de la liquidez monetaria, con el fin de mantener controlada la evolución de la inflación y los movimientos del tipo de cambio en las mesas cambiarias de la Banca, al incidir en la demanda de divisas mediante una mayor captación de bolívares en circulación.
Los Títulos de Cobertura destinados a las personas naturales y jurídicas privadas, son denominados en moneda nacional y el monto mínimo de cotización es a partir de Bs 50.000 con incrementos de Bs 5.000. Estos títulos tendrán plazos de 28 y 56 días, colocados a la par y no negociables, excepto que antes de su vencimiento sean vendidos por sus tenedores únicamente al BCV.
El rendimiento de estos títulos se obtiene a partir de la tasa de interés base anual de las operaciones de absorción (tida) y por la variación del índice de Inversión publicado por el BCV, lo que significa que estarán indexados al tipo de cambio oficial.
Los plazos y condiciones pueden variar entre convocatorias, en atención a lo que disponga el Ente Emisor, como resultado de su evaluación continua de las principales variables económicas, entre ellas, las monetarias y crediticias.
Con los Títulos de Cobertura se intenta una mayor incidencia, tanto en la trayectoria de los agregados monetarios, como en el comportamiento del mercado cambiario, ya que ofrecen un rendimiento más alto a sus inversionistas con respecto a mantener coberturas en divisas, por lo que se constituyen en un instrumento más atractivo en comparación a estas últimas, sostiene el boletín de prensa publicado por el BCV.
«De allí, que estos nuevos títulos financieros afianzan las sinergias entre ambas políticas (la monetaria y cambiaria). El BCV reitera su compromiso de continuar contribuyendo a disminuir la inflación hacia niveles cada vez más tolerables y de esta manera, seguir aportando a la generación de condiciones para la dinamización de la actividad económica y el aumento del bienestar social».
El mecanismo seguido por el BCV, hasta el momento, para incidir en el mercado de divisas es la intervención cambiaria, que consiste en la venta a los bancos de divisas en efectivo a un precio fijo, determinado por el emisor, y el cual debe mantenerse en las operaciones de reventa por parte de las instituciones financieras en un plazo preestablecido.
Hasta ahora, el BCV ha colocado divisas vía intervención por un monto de 792,1 millones de dólares en lo que va de 2022, a un promedio de 63 millones de dólares por inyección semanal. Habrá que esperar para ver si este nuevo mecanismo de absorción de liquidez impacta de alguna manera el suministro de moneda extranjera a los bancos, por parte del emisor.
La reaparición de las operaciones de mercado abierto también puede ser un aviso de que habrá una mayor emisión monetaria en los próximos meses, debido a una mejora coyuntural de los ingresos petroleros y a mayores compromisos con empleados públicos y otros programas que el gobierno aspira desarrollar en el plano social.
Fuente: Banca y Negocios