El analista e investigador en geopolítica energética y geoeconómica, Vladimir Adrianza, precisó que durante 100 años, Venezuela fue «periferia directa de los Estados Unidos, a través de un modelo económico basado en el petróleo».
En ese sentido, destacó que la nación caribeña necesita andar por los caminos «del desarrollo propio, integral, que pueda desarrollar nuestra fuerza productiva».
Sostuvo que la oportunidad que está brindando el presidente de Rusia, Vladimir Putin, a su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, de que asista a la próxima cumbre de los BRICS, «es una posibilidad muy buena», puesto que no sería bajo la condición de ser «centro periferia la que imperaría en esa relación de Venezuela» y las naciones de esa organización.
«Se está buscando un nuevo orden mundial basado en una cooperación más horizontal, no en el sometimiento de una nación a otra, y eso es algo que a Venezuela le interesa significativamente», indicó.
«Se abrirán puertas» con los BRICS
Adrianza manifestó que bien sea que viaje el Presidente venezolano o cualquier otra autoridad del país a esa cumbre, «se abrirán un conjunto de puertas, las cuales son convenientes para Venezuela».
Apuntó que es probable que Venezuela entre a los BRICS y esto beneficiaría a la nación caribeña, «porque nosotros no podemos seguir con la concepción de (ser) centro periferia, que es lo que nos han aplicado por más de 500 años».
Aclaró que Venezuela no solo es petróleo y gas, sino agricultura, ganadería: «es posibilidades de fabricar en Venezuela para exportar. Es una relación de igual a igual, mucho mejor planteada».
«Veo altamente probable que Venezuela, posiblemente en este año, entre formalmente a los BRICS. Pero de no entrar, también representaría una alternativa muy buena porque está abierto un camino para poder transitar y cooperar con un conjunto de naciones que hoy por hoy, representan más del 34% del Producto Interno Bruto (PIB) mundial», explicó en Unión Radio.