Real Madrid empata en Valencia 1-1

Un gol a cobro de tiro de esquina al minuto 95 por parete de Benzema, le dió un agónico empate al Real Madrid en Mestalla, lo que dejará el liderato de La Liga en el clásico Barcelona Real Madrid a disputarse el próximo miércoles. El Madrid llegará al Camp Nou a la altura del Barça. Lo logró en un final agónico, propio de un equipo con carácter. Protagonizó un duelo mayúsculo con el Valencia, pleno de equilibrio y sufrimiento, disputado en cada pelota. Soler había tranformado la mejor jugada valencianista y creyó tener el triunfo en el bolsillo. Un arreón final con Courtois sumado al ataque preparó el gol de Benzema que dejó en tablas el partidazo.

Y es que, a la hora de la verdad, Zidane pensó en el Clásico. Es natural. Casemiro se quedó en el banquillo, entró Nacho en la posición que ocupaba el día en que se lesionó, frente al Brujas, y el Madrid saltó a Mestalla con cuatro medios, dispuesto a marcar el paso. Como al Valencia ya le iba bien esa clase de partido, ordenado para buscar la velocidad a la contra de Ferran y Rodrigo, ambos interpretaron bien sus papeles.

Jaume Doménech ofrece argumentos para optar a la titularidad. Si en Ámsterdam apareció como un gato en los centros cruzados del Ajax, frente al Madrid sacó dos remates envenenados, especialmente uno de Kroos con bote previo para aumentar la dificultad. La presentación del Madrid fue excelente, presionando bien en campo ajeno, con Valverde y Kroos en la sala de máquinas. Además de las manos de Jaume, Benzema rondó el gol con un buen cabezazo cruzado que se escapó por poco.

Al Valencia le costó salir, aunque tenía argumentos. No necesitaba elaborar, sino buscar a Rodrigo de espaldas y la velocidad al espacio de Ferran. Así llegó su primera ocasión, tras mano a mano con Varane que el valencianista resolvió blando. Despertó el cuadro local, que tiene un mérito indiscutible. Con un regimiento en la enfermería se mantiene orgulloso y reconocible, colgado de Parejo, Coquelin y Rodrigo para gestionar la pelota. Pudo incluso el Valencia adelantarse en el tramo final, tras un centro tenso de Gayá que midió mal Courtois y Ferran estuvo a punto de rebañar.

Los mismo protagonistas, nada más volver de vestuarios, alteraron el pulso del partido. Rodrigo aprovechó un desajuste madridista por derecha y Ferran encaró a Courtois, que se hizo enorme para mantener el empate. Fue la constatación de que el decorado había cambiado. El Valencia gestionaba con fluidez el balón, aunque sin alborotar en el área más allá de las llegadas por izquierda de Gayá. Pocos laterales influyen tanto en el juego, atacando y defendiendo.

Con el duelo bloqueado, intervinieron los técnicos. Manu Vallejo fue la apuesta de Celades, enviando a Ferran al interior y a Wass al lateral. Zidane, como es costumbre, tardó bastante. Metió extremos, Bale y Vinícius, para ganar presencia en área rival. El premio era plantarse en el Camp Nou como líder. Como para despreciarlo y conformarse con el empate.

La mejor jugada colectiva del Valencia hizo bingo. Dobló Wass por derecha, apuró línea de fondo, los puntas hundieron a los centrales y Soler, el más listo, recibió el pase atrás para remachar a puerta vacía. Con el 1-0, Zidane metió a Jovic a la desesperada. Ni el serbio ni el galés son de revolucionar un partido. Pudo marcar el Valencia en una contra. Jovic anotó en fuera de juego. Bien anulado. El Madrid se fue arriba, Benzema desbordó por banda derecha y forzó un córner. El último. Courtois llevó sus dos metros al área, buscó el cabezazo, obligó al rechace de Jaume y Benzema embocó arriba. Un final tremendo para un partidazo resuelto en tablas. Como en Anoeta. Dos duelos fantásticos. Menudo Clásico se nos viene.