Esta niña se bañó en un río y una ameba le comió el cerebro

Hannah Collins, una niña de 11 años, murió luego de que una ameba se comió su cerebro. Los científicos explican que es posible que Collins adquiriera el parásito después de bañarse en el río Edisto (Charleston, Estados Unidos). El microorganismo es conocido por los expertos como Naegleria fowlerina, o “ameba comecerebros”.

En su página de Facebook la madre de la pequeña expresó su dolor a través de las siguientes palabras: “Mi pequeña siempre estará conmigo. Trataré de encontrar consuelo en el hecho de que un día estaremos unidas en su nuevo hogar, el Cielo”.

No es la primera vez que esta ameba cobra la vida de una persona, ya que en Carolina del Norte se dio un caso similar, pero en esa ocasión le ocurrió a Lauren Seitz, una joven de 18 años de edad que se encontraba de viaje en esa zona.

El proceso de transmisión del parásito es a través de cuerpos de agua dulce. Al entrar a bañarse, una persona puede resultar contaminada al pasar la ameba por su nariz, lo que le proporciona al microbio un lugar seguro y cómodo para alimentarse, produciendo así meningoencefalitis amebiana primaria. Los síntomas no aparecen sino hasta después de cinco días y pueden incluir dolor de cabeza, fiebre, náuseas y vómitos.

Luego de esto la persona infectada muere en menos de una semana. De acuerdo con el portal RT solamente tres personas de las 138 que se han infectado desde 1962 (en EE.UU) han sobrevivido.

 

CD