Douglas Rico, director del Cicpc, ofreció en redes sociales los detalles detrás del infanticidio de la niña Yadimar Del Valle Sierra Elías, que tenía solo 11 años cuando una “bala perdida” acabó con su vida en el sector La Lira, del barrio La Dolorita, en Petare, estado Miranda.
“Comisiones de la División de Investigaciones de Homicidios realizaron las pesquisas correspondientes, logrando ubicar y aprehender a cinco de los responsables en tan atroz hecho que conmocionó a la comunidad caraqueña”, recordó Rico en Instagram.
Mediante un arduo proceso de investigación, entrevistas a testigos y elaboración de retratos hablados, se logró identificar y detener a:
Oscar Alejandro Flores Castillo (32);
Jesús Jonathan Padrón Rivas (40);
Ángel Ignacio Camargo Hernández (32):
Luis Enrique Molina Salcedo (44):
y Miguel Antonio Sánchez Quiroz (20)
El comisario alertó que aún quedan por detener Bugui Alexander Romero Hurtado, de 20 años, y su pareja, Oriana Paola La Rosa Cedeño, de 25.
Se pudo conocer que el día del hecho Miguel recibió una llamada de Bugui Romero, con la finalidad de ingerir bebidas alcohólicas junto a su pareja Oriana, en una vivienda ubicada en la zona en mención. Con el pasar de las horas, Bugui le indicó a Miguel que aparentemente había unos hombres fuera de la vivienda que pretendían “despojarlo de sus pertenencias”, optando Miguel por salir de la vivienda y verificar lo que sucedía.
Por su parte, Bugui portaba un arma de fuego con la que apuntaba hacia residentes de la zona, originándose una discusión entre los presentes. Fue entonces cunado Bugui contactó al resto de sus cómplices, la mayoría adscritos a la Policía del estado Miranda, quienes llegaron a bordo de dos vehículos, siguiendo instrucciones de Miguel sobre cómo acudir al sitio. “Una vez llegaron al lugar, desenfundaron armas de fuego y las accionaron contra los residentes, siendo una de las lesionadas la niña Yadimar”, confirmó Rico.
Es decir, según el relato de las autoridades, no se trató de una “bala perdida”, sino de un crimen premeditado con alevosía.
“Los detenidos y las personas en fuga, al notar lo ocurrido, emprendieron una veloz huida del lugar”, apuntó el director del Cicpc. Durante la detención de los mencionados, se les ubicó como evidencias cinco armas de fuego tipo pistola, utilizadas el día del hecho. Los cinco victimarios aprehendidos fueron puestos a la orden de las Fiscalías 66º 105º y 109º del Ministerio Público del Área Metropolitana de Caracas.
Nuevamente, el alcohol y las disputas vecinales causaron otra tragedia en la sociedad venezolana.
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