De dos escopetazos mataron a un trabajador de la empresa Cocacola

De nuevo la delincuencia enlutó a un hogar anzoatiguense. Esta vez la víctima fue un padre de familia que esperaba la llegada de su quinto hijo, al que no lo dejaron conocer, reseña El Tiempo.

Poco antes de las 4:00 de la madrugada, Júnior Antonio Contreras, de 44 años, regresaba a su casa, en la calle La Clavellina del barrio La Orquídea, en Barcelona, después de tomarse unos tragos con un grupo de amigos.

Sus parientes contaron que Júnior guardaba su vehículo Toyota Corolla, color rojo, en el garaje residencia, cuando fue sometido por unos hombres, quienes le quitaron el koala con sus pertenencias.

Los individuos intentaban ingresar a la vivienda, pero Contreras ofreció resistencia y uno de ellos le disparó con una escopeta por la espalda, y cuando se retiraba le efectuó el otro.

Auxilio

Al escuchar los tiros, su esposa salió y lo encontró tirado en el piso moribundo, y no alcanzó a decirle quién baleó.

Su hermano Jorge Contreras señaló que, junto a un vecino y un cuñado de nombre Rosario, lo recogieron y lo llevaron al Centro de Diagnóstico Integral de Mesones, pero posteriormente lo trasladaron a una clínica privada, en la avenida Caracas, en Barcelona, pero ingresó sin signos vitales.

Contreras trabajaba en la Coca Cola como montacarguista y tenía 15 años de servicio. Era casado y tenía cuatro hijos. Deja a su esposa con nueve meses de embarazo. Era el mayor de siete hermanos.

Los parientes del trabajador claman justicia y que esta muerte no quede impune.

Una comisión del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), interrogan a varios residentes de la comunidad, a fin de lograr la identidad de los pistoleros. Asimismo, toman declaraciones a los familiares.

Amigos de Contreras lamentaron lo ocurrido y pidieron a las autoridades la aplicación de un dispositivo de seguridad en La Orquídea.