La comida te afecta en la vida mucho más de lo que crees. Lo que comes dictamina tu presente y tu futuro, y por lo tanto también tu destino, sea este bueno, o puede que quizás resultando en tragedia asegurada, la peor de ellas; la muerte. La comida puede ser curativa -como la cantidad de alimentos y sus beneficios para la salud que te hemos explicado en EcoRemedios- o puede ser todo lo contrario y causar enfermedades y síntomas que te fastidiarán el resto de la vida, o te robarán el resto de la vida…
La comida además nos afecta psicológicamente continuamente. Piénsalo: si te ves gorda o gordo quieres adelgazar, si no lo logras te vuelves una persona depresiva, más triste, puede que incluso “dejes de vivir” porque no quieras ir con tus amistades a la playa para que no te vean, incluso llegando a ni querer salir de tu propia casa por los mismos motivos. Dejando muchas oportunidades atrás y no experimentarlas en esta corta vida, todo por verguenza y el daño psicológico interno causado por “la comida”.
El mundo está hecho para vendernos una falsa imágen de nosotros mismos, de la sociedad, consumir marcas o no eres nadie, actualizar cada año tu teléfono móvil para acabar usando Whatsapp, necesitar un cuerpo de anuncio o si no tampoco eres nadie, ni para ti mism@ ni para quienes tienes a tu alrededor. El mundo está loco y es muy fácil caer en una depresion por temas relacionados por la comida. Y ni entremos ya en el tema económico actual, la falta de trabajo, las pocas ganas de vivir viendo en qué se está conviertiendo el mundo actual, que a cada año que pasa parece que la humanidad de la tierra es el hazmereir del universo. Gente presumiendo de una vida que no tiene mediante redes sociales, el querer aparentar, el pensar como borregos, el perder el 99 por cien de nuestra vida pegados a la pantalla de un ordenador, hacer fotos de los platos que comemos y subir después todo a las redes sociales para que nos den un “Me gusta” carente de sentido…
Nuestras dieta a lo largo del tiempo también ha ido cambiando, por no decir empeorando. Sólo hay que ver los niveles de obesidad que manejemos hoy en día, da igual del país que hablemos, sea España o México, USA o Argentina, cada vez hay más personas obesas, más personas con graves problemas de salud, y más personas que sin ser conscientes se están envenenando mediante comidas que se venden y anuncian por todas partes. Prohíben las drogas por ser malas, por miedo a que la gente se fastidie la vida y se vuelva adicta, pero por otro lado anunciar un McDonalds cada 10 kilómetros de autopista es algo normal, permitir la venta de hamburguesas hechas con “vete a saber qué carne” es perfectamente aceptable a pesar de no ser nada saludable, y a pesar de poder llegar a ser tan peligroso como “probar la droga”. Una de destruye supuestamente el cerebro, y la otra, legal, te destruye lentamente las arterias, causando finalmente en ti un ataque al corazón. Vivimos en un mundo de incongruencias, y la mala alimentación no difiere de una mala droga.
Bebidas cargadas de azúcares vendiéndose libremente en supermercados y con un target enfocado a los más jóvenes de la casa, comidas congeladas para saltear en casa en 3 minutos a cambio de robarte 3 minutos de tiempo de tu vida por estar comiendo algo lleno de químicos, hasta las frutas -que supuestamente serían lo más sano y natural encontrado en un supermercado- están ya hoy en día también rociadas y llenas de químicos y otras sustancias malignas para nuestra salud, totalmente anti-naturales. Uno ya no puede comprar ni frutas y verduras en la tienda sin antes tener que seguir uno de nuestros consejos para limpiar y desinfectar alimentos. De hecho, hemos llegado al punto de tener que hasta limpiar los vegetales y frutales con Agua Oxigenada en nuestra propia casa, o corremos el riesgo de estar comiendo una fruta más cargadas de químicos agrícolas que de antioxidantes…
Lo mejor que puedes empezar a hacer es comer alimentos orgánicos
Eso no significa que necesariamente debas hacerte una persona vegetariana o vegana, no, simplemente consumir productos orgánicos, que sepas que hayan sido bien tratados y provengan de granjas ecológicas de calidad, no super producciones que sólo buscan el beneficio propio por generar más y más cantidades, sin importarles la calidad de sus productos, sean estas piscifactorias creando miles de peces sin a penas los niveles de Omega 3 que deberían contener, o naranjas que han sido multiplicadas por productos tóxicos agrícolas y a penas saben ahora a naranja cuando te las llevas a la boca, ni dulce, ni tampoco Vitamina C, sólo estás comiendo una ilusión, una cosa de color naranja que no sabe a naranja.
Recuerda, los alimentos pueden cambiarte la vida para bien, incluso -literalmente- salvartela. Pero tienes que pensar bien lo que haces, y no meterte cualquier cosa al cuerpo. Dime, tú que eres una persona tan sana y quieres vivir los máximos años posibles para disfrutar de los tuyos: Te meterías una raya de cocaína cada mañana para desayunar? Y un pinchazo de Heroína cada tarde? Y para cenar un poco más de los restos del desayuno? No verdad? Entonces por qué sí comes una Pizza congelada llena de azúcares y químicos en vez de amasarte tú una, o por qué comes Nuggets congelados llenos de todo tipo de sustancias anti-naturales, en vez de comprar tú el pollo y usar un poco de harina -y mejor integral- desde la comodidad de tu casa? No te metas drogas legales, al igual que no lo harías con las ilegales. Sólo tienes un cuerpo, y por el momento que tú sepas, sólo tienes una vida. Eres lo que comes. Y eso significa, o una persona sana, o una persona con apariencia de cerdo, o una persona dentro de una caja de pino. Tú decides.
Fuente: http://ecoremedios.com