Una encuesta reveló que el 86% de las mujeres que trabajan fuera de casa sufre fatiga permanente y se siente exhausta al llegar a sus casas; que el 60% tiene dificultades para dormir, y que una de cada cuatro padece de somnolencia diurna.
Aparte de los factores hormonales, existen otros motivos que desencadenan estas patologías. En realidad, un 50% de las alteraciones del sueño se producen por razones físicas y el otro 50% corresponde a las responsabilidades de la mujer en la sociedad actual tanto en su faceta de madre o/y ama de casa como de profesional.
“La ecuación «maternidad + profesión + labores del hogar» suele estar detrás de las alteraciones del sueño entre las mujeres. El ritmo de vida actual y la carga de responsabilidades hacen que la mujer actual altere su hábito de sueño, con las implicaciones que esto conlleva en su salud, rendimiento laboral y estado de ánimo”, afirma la Dra. Mireia Pascual de la Clínica del Sueño Estivill.
10 Consejos para una mujer con trastornos del sueño
- Mantener unos horarios regulares, estableciendo una hora fija para acostarse y levantarse.
- Establecer la asociación correcta entre sueño y cama.
- Intentar evitar los pensamientos negativos y las preocupaciones antes de acostarse.
- Ropa ligera para dormir, sobre todo durante la menopausia.
- Una cama amplia y con ropa de tejidos naturales.
- Controlar las condiciones de temperatura, luz y ruido de su dormitorio. Se recomienda entre los 18 y 22ºC.
- No tomar café ni alcohol a partir de las 6 de la tarde y reducir el consumo durante el resto del día.
- Practicar un ejercicio moderado de forma regular, preferiblemente en horarios alejados del momento de acostarse.
- Reservar las últimas horas de la tarde para realizar actividades placenteras y relajantes.
- Se ha de intentar cenar algo suave como pasta, verduras y derivados lácteos evitando las proteínas y la fruta, que aunque sea buena, es más costosa de digerir.