Pérez Vivas: Estamos obligados a generar una economía donde el salario no sea una limosna

César Pérez Vivas

César Pérez Vivas, precandidato presidencial de la Concertación Ciudadana, estrechó la mano y vio a los ojos a comerciantes y transeúntes del boulevard de Catia, la populosa parroquia del oeste de Caracas. En razón de presentarles su propuesta de país, el gocho que aspira ser el número 8 de sus paisanos en llegar a Miraflores, recorrió toda la periferia del mercado, donde recogió las inquietudes y necesidades de los vecinos de la zona.

Acompañado de líderes locales que le extendieron la invitación a la pobre zona capitalina, Pérez Vivas dejó claro que, una vez sea electo para la primera magistratura del país en 2024, centrará todos sus esfuerzos en la recuperación económica del país para que los trabajadores cuenten con un salario digno y no con la limosna que hoy representa el sueldo básico, que hoy ronda seis dólares al mes.

Cuestionando enérgicamente que hoy el ingreso base de los trabajadores venezolanos no alcanza ni para comprar un cartón de huevos, el versado dirigente político se refirió también a los jubilados y pensionados, quienes se están llevando la peor parte de la catástrofe económica que sucumbe al país.

«Aquí en Catia hemos encontrado un pueblo angustiado y triste, como consecuencia de la hambruna que (Nicolás) Maduro le está generando al país. Los ciudadanos de esta comunidad han expresado su necesidad de cambio y apoyo a la propuesta de la Concertación Ciudadana para lograr derrotar al modelo socialista en unas elecciones el próximo año», declaró Pérez Vivas a medios que lo abordaron en el lugar.

El demócrata cristiano subrayó que Venezuela urge de un cambio político para tener una economía que genere empleo: «Los buhoneros de Catia hoy son hostigados por cuerpos de seguridad, frente a esto tenemos que producir una economía donde la gente gane para comer, que el salario signifique una oportunidad para vivir dignamente».

En este sentido, enfatizó que será el presidente que va a recuperar la economía y el salario, para que la gente humilde tenga la oportunidad de ganarse el pan con el sudor de su frente y que el salario les alcance realmente para comer y vivir dignamente.