Juan Pablo Quiroga Quintero tiene siete años. Es paciente renal crónico y necesita ayuda humanitaria urgente.
Por ser hijo de padre chileno, está pautado para viajar este 17 de diciembre a Santiago de Chile, en el segundo vuelo de retorno asistido del Gobierno de Sebastián Piñera. Sin embargo, desde hace un año espera su prórroga de pasaporte.
“Estamos pidiendo un acto humanitario. Juan Pablo necesita una intervención quirúrgica de urgencia; su vida está en riesgo. No es una denuncia, es un rogatorio al presidente Nicolás Maduro, para poder gestionar la prórroga del pasaporte“, expresó su madre, Karen Quintero.
No puede salir del país hasta tanto no tener la prórroga del documento y solo le resta un día para el viaje. “Necesita una operación de vejiga urgente. Queremos que algún funcionario nos escuche y nos ayude, porque estamos desesperados; es una emergencia humanitaria. Queda de parte de ellos una respuesta”, reiteró Quintero.
Juan Pablo nació con espina bífida, enfermedad que luego derivó en una incapacidad renal diagnosticada en febrero de este año. Por ello su organismo no puede procesar la orina. Ha estado hospitalizado cinco veces este año y espera poder operarse el próximo jueves 20 de diciembre en la capital chilena, luego de que su padre gestionara los trámites requeridos.
La urgencia por viajar responde al estado crítico en la cual se encuentra la red hospitalaria del país y el deterioro de las clínicas. Quiroga está en lista de espera para trasplante. Sin embargo, el programa de trasplantes está paralizado desde hace año y medio.
“Aún podemos salvar su riñón. Hemos agotado todas las opciones. Por la vía pública no se puede realizar su operación y por la privada es demasiado costosa”, dijo.
El Gobierno chileno puso a disposición un segundo vuelo de retorno a este país. El objetivo es ayudar a connacionales que se encuentren en estado de vulnerabilidad en el extranjero. En esta política, casos como el de Quiroga tienen mayor prioridad. Su madre aseguró que el trámite del vuelo solo duró dos semanas en aprobarse en el consulado chileno.
Un año en espera
La madre de Juan Pablo ha pasado por tres sedes del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) en Caracas, durante un año para tramitar la prórroga del pasaporte. Además, ha cancelado la estampa en tres oportunidades, sin ninguna respuesta.
Primero en la sede de Las Mercedes en Baruta, le excusaron que no están realizando el trámite y la remitieron a Plaza Miranda. Aquí un funcionario también la remitió ahora a la sede de Propatria, en donde nuevamente le indicaron dirigirse a su sede original.
“En todas me han dicho que no pueden solucionar el problema y solo me remiten a otra. Le pido al presidente del Saime que libere la prórroga, que es lo único que necesita”, expresó, reseña Efecto Cocuyo