Desde 2013 hasta el 2018 se realizaban alrededor de cinco aumentos de sueldos mínimos en Venezuela al año; sin embargo esta realidad cambió en el 2019 cuando se efectuaron solo tres ajustes; siendo el año con menos anuncios de este tipo, desde que Nicolás Maduro llegó al poder.
Muchos han sido las denuncias, protestas y reclamos de los venezolanos para exigir un «salario digno» ante una inflación galopante que ha «pulverizado el sueldo de los trabajadores»; que hoy en día equivale a 1,5 dólares mensuales.
En lo que va de 2020 se han realizado dos ajuste salariales, el último se efectuó el 27 de abril de 2020 en el Decreto N° 4.193., un aumento de 60%, pasando de Bs.S 250.000 a Bs.S 400.000 y el bono de alimentación pasó de Bs.S 200.000 a Bs.S 400.000.
El director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, dijo recientemente en una entrevista que era probable que la administración de Nicolás Maduro decrete un nuevo aumento salarial, para tratar de mitigar los efectos de la pandemia, pero aseguró que no significará nada. “Ya no es referencia de nada en Venezuela”.
Ante comentario, vale resaltar que también en años electorales se han realizado ajustes inesperados, como pasó en 2018, año en que se elevó el salario mínimo en seis oportunidades diferentes; el último anunció de ese año fue hecho por Maduro a menos de un mes de las elecciones presidenciales.
Esta decisión de 2018 deja entrever que podría realizarse un ajuste salarial en los próximos meses, medida que, según Oliveros, podría venir con la premisa de “grandes anuncios”; sin embargo insistió en que no representará mejoras ni ningún tipo de ayuda a la población en estos momentos de pandemia.
Venezuela vive una crisis de hiperinflación desde 2017, mientras que la moneda local se desapareció frente a otros signos monetarios como el dólar que ganó mayor fuerza en los último año, con abundante circulación en el país.
Por su parte el salario actual, mantiene a la mayor parte del sector productivo por debajo del umbral de la miseria establecida por Naciones Unidas, según el cual una persona que devengue menos de 1,25 dólar por día está en pobreza extrema.
Según estimaciones de gremios, un venezolano requiere cerca de 600 dólares para cubrir gastos esenciales de alimentación, salud, vestimenta, vivienda y transporte, reseña Venepress