El volcán de Fuego de Guatemala, ubicado 50 kilómetros al suroeste de la capital, inició hoy una nueva fase eruptiva, la décimo cuarta en lo que va de año.
EFE
“El volcán de Fuego de Guatemala registra nueva fase eruptiva con explosiones moderadas y descenso de flujo piroclástico”, explicó a periodistas uno de los miembros de la estatal Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Dorilee Morales.
Hasta el momento, las autoridades no han informado de ninguna evacuación por este nuevo episodio.
Según un boletín del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), el coloso incrementó a las 10.00 hora local (16.00 GMT) su actividad con el descenso de una “serie de flujos piroclásticos”, es decir, nubes ardientes con material y gases a altas temperaturas.
Estos flujos se dirigen hacia la barranca Las Lajas, con dirección a Alotenango, en el departamento de Sacatepéquez, y hacia El Jute.
Además, hay “gruesas columnas de ceniza” de unos 5.000 metros de altura sobre el nivel del mar, que se desplazan hacia el oeste debido a la dirección del viento, agregó el boletín.
El volcán, de 3.763 metros de altitud, también genera “constantes sonidos de desgasificación” similares a una locomotora de tren, y retumbos “débiles y moderados”.
Hasta el momento, las comunidades aledañas de Panimache, Morelia y Santa Sofía, entre otras, tienen caída de cenizas.
Las autoridades anunciaron que mantendrán la vigilancia sobre la actividad del coloso, ubicado entre los departamentos de Chimaltenango, Escuintla y Sacatepéquez (suroeste).
En febrero pasado el volcán de Fuego registró una potente erupción que obligó a las autoridades a cerrar el aeropuerto de la capital por la lluvia de cenizas.
El volcán de Fuego es uno de los 33 colosos de Guatemala y, junto con Santiaguito y Pacaya, se mantiene en constante actividad.