El gobierno del presidente Nicolás Maduro recusará el fallo judicial que le negó el control al Estado venezolano de las 31 toneladas de oro depositadas en el Banco de Inglaterra, reseña EFE citando un comunicado del bufete Zaiwalla & Co., que lleva la defensa de Caracas en las cortes británicas.
Siempre siguiendo esta versión, la junta directiva del Banco Central de Venezuela -encabezada por Calixto Ortega- presentará sus alegatos en el Tribunal de Apelaciones de Londres en una fecha aún no especificada, tras haber sido autorizada el pasado 12 de septiembre por la jueza de la causa, Sara Cockerill.
En referencia a lo expresado por Zaiwalla & Co., la agencia española recuerda que «esta magistrada de la División Comercial del Tribunal Superior, quien emitió el dictamen del 29 de julio, autorizó el recurso al considerar que, dada la relevancia del caso, es interesante que una corte superior analice sus conclusiones».
El pasado 18 de junio, Cockerill se arrogó el derecho de dictaminar que las decisiones del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela para anular la pretendida junta «ad hoc» del BCV designada por el exdiputado Juan Guaidó, carecían de legalidad en el Reino Unido.
De su parte, Venezuela denunció que se trata de una aplicación extraterritorial de la ley británica, al tiempo que advirtió que Londres está obligado a respetar lo decidido por una instancia judicial interna y que sobre la base de estas decisiones, Guaidó y sus agentes podrían acceder a esa porción del erario venezolano sin ningún tipo de supervisión o control.
Pese a ello, el bufete asegura que el pasado 21 de septiembre, Cockerill frenó las aspiraciones de este grupo al negarles el acceso material a las reservas, con el argumento de que «no hay suficientes garantías de una buena gestión«, apunta EFE.
Si bien el Gobierno Bolivariano ha introducido este nuevo recurso, no hay indicios de que las cortes londinenses autoricen el retiro del oro –valorado en más de 1.000 millones de dólares– en el corto plazo, pues el Tribunal Supremo de ese país estableció que Downey Street solo reconoce a Guaidó como «presidente interino» de Venezuela, aunque el relacionamiento diplomático se realice a través del personal designado por Maduro.