Una comunicación emitida desde el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos, informó que los inmigrantes, tanto procedentes de Venezuela, como de Haití, Cuba y Nicaragua que permanecen en ese país bajo el programa denominado como CHNV “Parole Processes” (mejor conocido como parole humanitario) y recibieron una autorización de entrada temporal de dos años, tienen un lapso de 24 meses para cambiar sus estatus de permanencia.
La información, enviada a través de correo electrónico al canal estadounidense Univisión, indica que el cambio de estatus podrá hacerse a cualquier otro programa legal disponible, entre ellos el asilo.
El comunicado precisa que cualquier concesión discrecional de libertad condicional será por un período temporal de hasta dos años y añade que, a los inmigrantes que no se les otorgue el cambio de estatus o que no lo tramiten, deberán abandonar Estados Unidos al vencimiento de su período autorizado de libertad condicional.
Quienes no abandonen de forma voluntaria el país formarán parte de “procedimientos de deportación después de que expire el período de libertad condicional”, anunciaron.
Fue en abril de 2022 cuando inició beneficio del “parole humanitario” con el objetivo principal de que ciudadanos ucranianos que saliesen de su país de manera forzada, huyendo de la guerra tras la invasión rusa, pudieran migrar de manera ordenada a territorio estadounidense.
Para octubre de ese año, el presidente Joe Biden autorizó la inclusión de Venezuela en el programa, para disminuir la cantidad de ingresos de venezolanos a ese país a través de la frontera con México.