Vaticano nunca se pronunció sobre la exhumación de Franco

El Vaticano ha reiterado que en la exhumación del dictador Francisco Franco «nunca» se pronunció porque «no es de su competencia», después de que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, dijera que tuvo la ayuda del papa.

«Se precisa que la Santa Sede, sobre el asunto de la exhumación de Francisco Franco, ha reiterado en varias ocasiones su respeto a la legalidad y a las decisiones de las autoridades gubernativas y judiciales competentes», dice un breve comunicado.

El Vaticano subraya que, en esta cuestión, «ha instado al diálogo entre la familia y el Gobierno y no se ha pronunciado nunca sobre la oportunidad de la exhumación ni sobre el lugar de la sepultura, porque no es de su competencia», se zanja.

El comunicado del Vaticano llega después de que el diario «Il Corriere della Sera» publicase el pasado día 8 una entrevista en la que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, dice que las relaciones con el Vaticano «son serenas» y que el papa Francisco le había ayudado con este tema.

«Francisco es un papa carismático, espero poder encontrarle. Le cuento una cosa: En el tema de los restos de Franco me ha ayudado. En el Valle de los Caídos había una comunidad de benedictinos muy contraria a la exhumación. He pedido la intervención del Vaticano. Y todo se resolvió», afirmaba Sánchez.

Los restos del dictador fueron sacados de la basílica del Valle de los Caídos, cerca de Madrid, el pasado 24 de octubre, donde habían permanecido enterrados durante cuarenta y cuatro años.

El ataúd fue inmediatamente trasladado en un helicóptero militar hasta un cementerio municipal en El Pardo, un barrio de las afueras de Madrid, para su inhumación en el panteón familiar donde desde 1988 está enterrada su viuda, Carmen Polo.

Desde que el líder socialista expresara su voluntad de exhumar al dictador del monumental Valle de los Caídos, el Vaticano siempre ha defendido en sucesivos comunicados que no se opondría si así lo decidían las autoridades competentes del Estado español.

En la mencionada entrevista Sánchez defendía su decisión de sacar a Franco de la basílica: «Un dictador no merece un mausoleo, sus víctimas no pueden reposar junto a él. He actuado en un modo legal, aplicando la Ley de Memoria Histórica de (el expresidente Jose Luis Rodríguez) Zapatero y con un amplio apoyo popular», alegaba.

La vicepresidenta del Gobierno español, Carmen Calvo, se reunió con el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, en octubre de 2018 y hablaron sobre la salida de los restos para que no fueran inhumados en la catedral madrileña de la Almudena, como quería la familia del dictador.
EFE