Un sobre sellado ayuda a encontrar al asesino de una joven pareja décadas después del crimen

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Ray Vannieuwenhoven, viudo de 82 años de edad, conocido como ‘el viejo Ray’ en la aislada ciudad de Lakewood (Wisconsin, EE.UU.), fue arrestado por dos cargos de asesinato en primer grado y un cargo de asalto sexual en primer grado, décadas después de que cometiera el crimen.

Aunque el anciano daba la impresión de ser «una persona muy buena y normal», según relató uno de los vecinos a la agencia AP, se reveló que el 9 de julio de 1976 asesinó a David Schuldes, de 25 años, y a su novia, Ellen Matheys, de 24, cuando la pareja acampaba en un parque al noreste de Lakewood. Schuldes recibió un disparo en el cuello, mientras que Matheys fue violada antes de recibir dos disparos en el pecho. Una muestra del semen, recuperado del cuerpo de la joven asesinada, fue conservada.

El caso quedó en el limbo y durante casi 43 años Vannieuwenhoven vivía una vida normal fuera de la atención de los detectives. Sin embargo, en marzo del 2018, los investigadores solicitaron ayuda a Parabon NanoLabs, la compañía que revolucionó la investigación de casos fríos gracias a la combinación del ADN sospechoso con las bases de datos genealógicas.

En diciembre del año pasado, la empresa «pudo restringir un grupo de sospechosos a una familia específica vinculada al área», identificando a la familia de Gladys M. Brunette y Edward K. Vannieuwenhoven como posibles sospechosos del homicidio.

La pareja tuvo cuatro hijos y cuatro nietos, todos posibles sospechosos del asesinato de Schuldes y Matheys. A continuación, los investigadores comenzaron a tratar de obtener muestras del ADN de estas personas. En particular, de Ray Vannieuwenhoven, tercer hijo de la pareja identificada por la compañía. Para ello la Policía inventó una encuesta policial falsa y con el sobre lamido pudo obtener la muestra para compararla con el ADN tomado del cuerpo de Matheys.

Un oficial explicó a Ray que se pedía a los residentes que completaran una encuesta sobre la Policía local, algo que el anciano hizo. Entonces, el agente le pidió que sellara el formulario en un sobre, y después de que Vannieuwenhoven lamió la solapa, el oficial se fue. Vannieuwenhoven no se dio cuenta de que estaba sellando mucho más que un simple cuestionario.