El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el viernes que no ha acordado revertir los aranceles sobre bienes chinos, lo que generó nuevas dudas sobre cuándo las dos economías más grandes del mundo pondrán fin a una guerra comercial que ha frenado el crecimiento global desde que estalló hace 16 meses.
Funcionarios de ambos países dijeron el jueves que Estados Unidos y China habían acordado revertir los aranceles impuestos a los bienes provenientes del otro país en la “Fase 1” del acuerdo comercial. Pero la idea encontró una fuerte resistencia dentro del gobierno de Trump, informó Reuters horas más tarde.
Estas divisiones quedaron expuestas el viernes, cuando Trump dijo a reporteros en la Casa Blanca que no ha acordado revertir los aranceles ya establecidos.
“A China le gustaría hacer algo así como una marcha atrás, no una revocación completa, porque saben que no lo haría”, dijo Trump, que destacó que “no he acordado nada”.
El mandatario sostuvo además que China desea alcanzar un trato más que lo que él quiere y agregó que los aranceles impuestos por Washington generan “miles de millones de dólares” para las arcas de Estados Unidos.
“Estoy muy feliz en estos momentos. Estamos ingresando miles de millones de dólares”, aseguró Trump, que también reveló que el acuerdo comercial con China, si se concreta, se firmará en Estados Unidos.
“Podría ser en Iowa (…) o algún lugar como ese”, dijo el republicano, en referencia a un estado agrícola que ha sido golpeado por la guerra arancelaria.
Expertos dentro y fuera del gobierno estadounidense advierten que la “Fase 1” del pacto comercial aún podría desmoronarse.
Funcionarios de Washington dijeron que quedaba mucho por hacer cuando Trump anunció los bosquejos de un pacto provisorio el mes pasado y Pekín ha rechazado las demandas estadounidenses a realizar grandes compras agrícolas, entre otros temas.
Reuters