La Policía británica traza los pasos de la pareja afectada con Novichok

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La Policía británica traza este sábado los pasos de la pareja intoxicada el pasado 30 de junio con el agente nervioso Novichok, diseñado por Rusia entre los años 70 y 90, a fin de hallar el origen de la contaminación, en una investigación que podría durar «meses».

La Policía de Wiltshire, que trabaja en colaboración con la unidad británica antiterrorismo, dijo en su cuenta de Twitter que las pesquisas llevarán tiempo por «los retos» que plantea el caso, que conlleva el registro de numerosas áreas de las localidades de Salisbury y Amesbury, frecuentadas por la pareja afectada, reseñó Efe.

Los agentes han acordonado este sábado «como medida de precaución» varios lugares que se cree fueron visitados por Dawn Sturgess, de 44 años, y Charlie Rowley, de 45, antes de que ambos cayeran enfermos el pasado sábado.

Sturgess y Rowley fueron hallados con graves síntomas en la residencia de él en Amesbury y los análisis confirmaron que habían sido contaminados con un neurotóxico tipo Novichok, el mismo que se utilizó en el presunto ataque el pasado 4 de marzo en Salisbury del exagente doble ruso Sergei Skripal y su hija Yulia, que el Gobierno británico atribuyó al Kremlin.

Los Skripal se recuperaron y fueron dados de alta el 18 de mayo y el 10 de abril, respectivamente, sin que se hayan conocido todas las circunstancias del suceso.

La Policía trabaja ahora sobre la hipótesis de que Sturgess y Rowley, quienes, según la prensa, tenían problemas con las drogas y el alcohol, pudieron resultar intoxicados al entrar en contacto «con un objeto contaminado» con restos de la sustancia, que pudieron hallar en algún lugar aún no identificado que no habría sido desinfectado en la operación policial de marzo.

Conocidos de la pareja han declarado que en particular Rowley solía rebuscar entre la basura o desechos objetos que después pudiera reutilizar o vender.

Como parte de la investigación, los agentes han revisado 1.300 horas de grabaciones en cámaras de seguridad de circuito cerrado y han tomado declaración a varios testigos, mientras que prosiguen las labores de análisis y limpieza de las zonas potencialmente contaminadas.

La unidad antiterrorista ha difundido un resumen de las actividades que presuntamente llevó a cabo la pareja entre el 29 y el 30 de junio, que refleja que el viernes los dos estuvieron en el hostal John Baker para personas sin techo de Salisbury, donde ella residía, y después visitaron varias tiendas de esta localidad, escenario del caso Skripal.

Tras volver a pasar por el hostal por la tarde, por la noche tomaron un autobús a la cercana población de Amesbury para ir a la vivienda de Rowley, donde ella enfermó y el sábado por la mañana fue atendida por una ambulancia que la trasladó a un hospital.

A mediodía de ese 30 de junio, el hombre fue a una farmacia Boots y después regresó a su casa, tras lo cual visitó el Centro Bautista de Amesbury y sobre las 02.00 p.m (hora local) volvió a su hogar, hasta que a las 05:20 p.m (hora local) también cayó enfermo y fue hospitalizado.

Tras el caso de esta pareja, el Gobierno del Reino Unido volvió esta semana a pedir explicaciones al Gobierno de Rusia, que por su parte ha acusado a las autoridades británicas de hacer «juegos políticos sucios» y «asustar» a sus propios ciudadanos.

El caso Skripal, en el que Rusia ha negado estar implicada, causó un conflicto entre los dos países, con la expulsión de diplomáticos de las respectiva embajadas.

En el Reino Unido, aumentan las preguntas sobre la labor de la Policía en la primera investigación, ante la posibilidad de que la fuente de contaminación de esta pareja sea la misma que provocó el envenenamiento previo de los dos ciudadanos rusos.

Las autoridades de Salud Pública de Inglaterra han asegurado que el riesgo general para el público es «bajo», aunque no pueden descartar del todo que se produzca algún otro caso.