El presidente de Colombia, Gustavo Petro, pidió este martes a Latinoamérica «jugar un papel unido» y aseguró a su llegada a la cumbre de Brasilia que la región «tiene varias de las soluciones más importantes a la crisis integral que vive la humanidad».
«América Latina tiene que jugar un papel unido, tener una voz unificada porque tiene una gran potencialidad. Tiene en sus manos, en su propio territorio, varias de las soluciones importantes a la crisis integral que vive la humanidad», dijo Petro a los periodistas.
El líder colombiano, que fue el último de los doce mandatarios en llegar al palacio de Itamaraty, sede de la cancillería brasileña, afirmó que «el panorama mundial es crítico» y que «no se trata de pelear con el mundo, se trata de superar los problemas del mundo».
«Esta reunión claramente tiene como objetivo clarificar ese papel de América Latina, debatirlo, tratar de llegar a consensos», agregó.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, invitó a esta cumbre a los presidentes de los otros once países suramericanos: Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.
La única ausente es la presidenta peruana, Dina Boluarte, quien estará representada por el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, según el Gobierno brasileño.
El objetivo de esta cumbre, que se celebrará casi en su totalidad a puerta cerrada, es retomar el diálogo y analizar la posibilidad de que la región vuelva a contar con un foro de integración «puramente suramericano», que sea «permanente, inclusivo y moderno».
El canciller brasileño, Mauro Vieira, aclaró que no será una cumbre de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), fundada en 2008 por los doce países y luego abandonada por varios de los socios por razones ideológicas. EFE