Madrid y Barcelona no avanzarán a la siguiente fase en el proceso de salida de España de uno de los confinamientos más estrictos de Europa, una fase que permitirá reabrir bares, restaurantes y lugares de culto en algunas regiones a partir del lunes, anunció el Gobierno.
Las dos ciudades más grandes del país no cumplen actualmente con los criterios del Gobierno para proceder con la desescalada, dijo el jefe del centro de emergencias sanitarias del Fernando Simón en una conferencia de prensa el viernes.
Las regiones de Madrid y Cataluña, cuya capital es Barcelona, representan casi la mitad de los casos de infección en España.
Simón dijo que el 51% de la población pasaría a la siguiente fase de las medidas de desconfinamiento, incluyendo las Islas Canarias y las Islas Baleares.
“Quiero insistir en que esto no es una carrera, hay que tomar decisiones muy complejas y tomarlas en base a dos pilares, la cogobernanza, que ha funcionado al menos a mi parecer muy bien, y la cautela”, dijo el ministro de Sanidad Salvador Illa.
En una muestra de que la vida vuelve a la normalidad, las playas de Barcelona abrieron sus puertas de 6 a 10 de la mañana del viernes con medidas que permiten a la gente hacer ejercicio. La gente remaba en tablas y nadaba bajo la supervisión de la policía.
España ha sido uno de los países más afectados a nivel mundial y acaba de salir de un estricto confinamiento, ahora en su octava semana, que mantuvo a la población dentro de sus casas, golpeó la economía y provocó la pérdida de cientos de miles de puestos de trabajo.
El Gobierno pretende volver a la normalidad a finales de junio.
El confinamiento se aflojó esta semana, permitiendo a la gente hacer ejercicio y a las pequeñas empresas como peluquerías reabrir con restricciones de distanciamiento social.
En la fase final, que se espera para finales de junio, las playas se abrirán para tomar el sol y se relajarán aún más las restricciones sobre las tiendas y restaurantes.
Reuters