Las cosas más sorprendentes que los estadounidenses están acumulando por temor a los aranceles

Desde comida para gatos hasta vestidos de novia, los consumidores están comprando al montón o de forma anticipada para prepararse ante el inminente aumento de muchos de los productos

por INFOBAE

La semana pasada nos devolvió de golpe a esa mentalidad, una vez más tratando de descubrir cómo ahorrar dinero y conservar la cordura. Esta vez no por una pandemia, sino por una promesa de campaña. El presidente Donald Trump cumplió con su promesa de imponer algunas barreras comerciales “recíprocas”, lo que provocó represalias de otros países. Eso derivó en amenazas de escalada por parte de nuestros socios comerciales, caos en Wall Street y largas filas en Costco, además de advertencias alarmistas, en ciertos rincones de internet, de que todos deberíamos abastecernos urgentemente de nuestros sueros favoritos de mucina de caracol.

Luego, por supuesto —¡después de todo eso!—, la mayoría de los aranceles fueron suspendidos y reprogramados para entrar en vigor en 90 días. Al menos, algunos de nosotros finalmente nos decidimos a comprar productos que veníamos postergando.

Como esas mucinas de caracol. ¿Pensabas que esto se trataba solo de artículos esenciales? Quizás subestimas cuánto aman los estadounidenses sus productos especiales. Pasamos los últimos días revisando redes sociales y foros en línea para averiguar qué productos los consumidores consideran imprescindibles. Aquí van seis artículos sorprendentes que los estadounidenses están acumulando por temor a que sus precios se disparen.

El acero estañado, el material con el que se envasan la mayoría de las comidas húmedas para gatos, ha sido objeto de aranceles en los últimos años (REUTERS/Ajeng Dinar Ulfiana)

El acero estañado, el material con el que se envasan la mayoría de las comidas húmedas para gatos, ha sido objeto de aranceles en los últimos años tanto bajo la administración Biden como en el primer mandato de Trump, y los ingredientes alimentarios provenientes de todo el mundo probablemente se encarezcan en general.

Algunos alimentos para gatos se producen en Estados Unidos, pero quienes tienen gatos con alergias (o gustos caros) están comprando en grandes cantidades las comidas importadas favoritas de sus mascotas. En Reddit hay un animado debate, donde un dueño de un gato alérgico escribe: “Desafortunadamente, el ingrediente principal de su alimento proviene de Francia, o al menos así fue durante problemas anteriores de la cadena de suministro, así que podría verse afectado. Por suerte, las bolsas selladas duran casi dos años, así que me abastecí y tengo para unos seis meses”.

El pasado octubre, The Washington Post investigó y confirmó lo que los fanáticos del K-beauty saben desde hace tiempo: que el protector solar coreano hace que el estadounidense parezca tan útil contra el sol como unos huevos revueltos. Como explicó la científica cosmética Michelle Wong en un video del Post, los protectores solares están regulados como medicamentos en Estados Unidos (a diferencia de Europa y Asia, donde se regulan como cosméticos). Esto significa que “los científicos estadounidenses no tienen tantos filtros disponibles”, lo que dificulta formular protectores que bloqueen los rayos UV, tengan una textura agradable y se combinen bien con otros productos de maquillaje.

El protector solar coreano logra las tres cosas, y por eso sus seguidores lo están acumulando. En un hilo de Reddit sobre qué productos de belleza comprar ahora, fue una de las opciones más destacadas. Una usuaria que compró un año de su protector favorito se lamentó: “Realmente no puedo volver a usar protectores solares de EEUU”.

La posibilidad de que los aranceles aumenten drásticamente el precio de los vestidos de novia —ya de por sí costosos— ha llevado a algunas novias a reservar con anticipación (Imagen Ilustrativa Infobae)

“Acumular” tal vez no sea el verbo correcto para algo que la mayoría de las personas compra solo una vez. Pero la posibilidad de que los aranceles aumenten drásticamente el precio de los vestidos de novia —ya de por sí costosos— ha llevado a algunas novias a reservar con anticipación. Courtney, una analista legal y masajista terapéutica de 34 años en Florida, quien pidió ser identificada solo por su nombre de pila para proteger su privacidad, se casa en noviembre. Desde el otoño pasado ha estado viendo vestidos en línea y su plan era probarse algunos en el showroom de su marca favorita en Los Ángeles en mayo. Pero hace tres semanas, preocupada por los aranceles, pidió el vestido que más le gustaba, sospechando que probablemente se enviaría desde China.

“Solo espero que me quede bien y que se vea bonito en persona”, dice Courtney. “No es exactamente la experiencia nupcial que quería, pero es lo que hay.”

¿Creías que solo los granos de café gourmet importaban? Para nada. Como escribió un usuario en Reddit, en un hilo sobre qué acumular: “Compré una reserva de café instantáneo alemán para dos años porque no voy a sobrevivir si no puedo estar con cafeína en menos de un minuto”. Vale aclarar que esto fue en el foro para padres primerizos, así que, comprensible.

Una gran parte del cabello usado para extensiones cosidas, con cinta adhesiva, k-tips y pelucas proviene del extranjero, especialmente de proveedores chinos.

“Ahora tenemos arancel sobre las extensiones”, dijo la usuaria de TikTok @simply_stacie, quien compartió un mensaje de WhatsApp de su proveedor en China: “¿Estás dispuesta a pagar el arancel?”.

Las extensiones de cabello humano suelen costar entre USD 100 y USD 400 por paquete, según la calidad. El cabello crudo y sin procesar —considerado el de más alta gama— puede costar aún más. Con los aranceles a la vista, los proveedores están advirtiendo a estilistas y clientas que los precios pueden subir. “Digamos que una extensión costaba USD 100. Con los aranceles, los proveedores podrían cobrarnos USD 120 o más”, explicó un vendedor en TikTok. Este cambio no afecta solo a mujeres negras, que suelen ser vistas como las principales consumidoras de extensiones. Pacientes con cáncer, personas con alopecia y otras condiciones médicas, así como celebridades y mujeres comunes que usan extensiones por volumen o estilo, también podrían sentir el impacto.

Polina Belchez, dueña de un salón de extensiones en el condado de Orange, California, contó a sus 22.000 seguidores de TikTok que ya se abasteció para seis meses. “¿Qué vamos a hacer?”, preguntó tras recibir el aviso de que los precios podrían subir un 50%. Otras estilistas dijeron que también acapararon papel de aluminio (para reflejos) y tinturas. Mientras tanto, algunos proveedores lanzaron “Ofertas por Arancel”, incentivando a comprar antes de que suban los precios. Como advirtió uno: “Asegúrate de que tu pedido se envíe antes de que empiecen los aranceles.”

En los foros de juegos de mesa, la mayoría ha estado hablando más de qué juegos prestarse, comprar usados o rescatar del armario que de qué stockear. Aun así, algunos están adelantando compras antes de que se apliquen aranceles a los juegos y expansiones impresos en China, que representan una gran proporción del mercado.

“Ya subió USD 15 por caja”, dice Stout, de 43 años

El modelo de negocio de Christopher Stout depende completamente de productos importados de Asia. Así que cuando el dueño del café de sushi temático anime Isekai Sushi Cafe en Tampa se enteró de que los aranceles eran inminentes, decidió abastecerse de productos no perecederos que no ocupan mucho espacio —como el nori japonés que usa. “Ya subió USD 15 por caja”, dice Stout, de 43 años. “En el panorama general, cuando uso un par de cajas por semana, son 30 dólares. Pero cuando muchos productos están subiendo, ahí empieza a ser un problema”. Le preocupa que, por ejemplo, la próxima vez que pida su marca favorita de salsa de soja, el aumento lo tome por sorpresa.

Para compensar el alza en los costos de preparar sushi, Stout está considerando subir los precios, pero también trabaja para obtener una licencia para vender cerveza y vino. Las bebidas alcohólicas, después de todo, generan mayores ganancias para los restaurantes —y la demanda nunca falta.

El hobby costoso favorito de la Generación Z está por volverse aún más caro, ya que gran parte de la industria global del perfume opera en Europa Occidental. Los fanáticos de las fragancias están comprando en consecuencia, compartiendo en redes sociales sus “botines pre-arancel” de la marca canadiense Zoologist, la francesa Fragonard y la perfumería británica Papillon. En el subreddit r/fragrance, donde los usuarios debatían qué comprar “antes de que lleguen los aranceles”, uno escribió que no sabía “si en el próximo año habrá aranceles, guerras comerciales, colapso económico o guerra, así que lo hice”.

Otro respondió de inmediato: “¡No se puede oler mal en medio de una guerra!”.

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