El socialista Pedro Sánchez, quien fue nombrado este viernes como presidente del Gobierno en España, ha estado siguiendo de cerca la situación que vive Venezuela.
En mayo, Sánchez llegó a reconocer el papel del expresidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, en encontrar una “solución dialogada” al conflicto venezolano. Señaló que estuvo en contacto con Zapatero las semanas antes de su viaje a Venezuela y le llamó la atención la complejidad de la labor que realizó en el país.
Sánchez incluso llegó a plantearse una visita a Venezuela, pero declinó la invitación al considerarla inoportuna, según OK Diario. En su agenda estaba planteada una visita a la Asamblea Nacional y reuniones con los presos políticos.
Sánchez se ha mostrado muy cercano a la causa de Leopoldo López, llegando a aprovechar su intervención en la reunión de la Internacional Socialista en la sede de la ONU para enviarle un claro mensaje de apoyo. “Vuestra causa, vuestra lucha, es nuestra lucha, nuestra causa, desde todas las latitudes que pertenecemos aquí a la Internacional Socialista estamos con vosotros y vosotras”, dijo a Leopoldo y su esposa Lilian Tintori en febrero de 2017.
En 2015, Sánchez se reunió con Lilian Tintori en el Congreso de los diputados, y envió la “solidaridad y el compromiso” al pueblo venezolano. “Todos trabajaremos porque haya libertad, democracia y ningún preso político”, aseveró el político español.
También ha sido contundente en su reclamo a Podemos por la posición que mantienen sobre Venezuela, reclamando su silencio ante los presos políticos en el país. “Es evidente que Iglesias y Monedero han colaborado asesorando y económicamente con el régimen de Maduro (…) Maduro, Chávez o Tsipras son juguetes rotos de Iglesias”, llegó a decir el español., reseña Sumarium