Corbin Madison no aguantó la «humillación» por los avances sexuales de su profesora y se quitó la vida en agosto pasado. Su padre presentó una demanda
Corbin Madison, un adolescente de Nevada (en EEUU), se sintió tan «humillado» por los avances sexuales de su maestra que decidió suicidarse en agosto pasado y ahora su padre presentó una demanda contra la gente que permitió que su hijo fuera víctima de abuso.
Madison fue encontrado en agosto de 2018 en un camión después de dispararse. Él fue una de las cuatro víctimas de Tennille Whitaker, quien fue sentenciada a 20 años de prisión el pasado octubre.
Según la demanda que presentó el padre de Corbin, el joven de 18 años decidió suicidarse por la «depresión, humillación y vergüenza» que le provocó el haber sido explotado y expuesto por su profesora, informó el diario The Elko Daily Free Prees.
La demanda señaló a la escuela de Elko County por fallar en prevenir o eliminar a los «depredadores sexuales» de sus filas, también aseguró que Chris McAnany, director de Wells High School había sido advertido de la conducta sexual de Whitaker con sus alumnos, en seis ocasiones entre 2016 y 2017.
Según la demanda, en la que Terry Madison exige 45, 000 dólares por daños, las autoridades ignoraron las quejas y permitieron que Whitaker «acosara sexualmente, molestara y abusara de niños durante años».
El sistema de Whitaker
La maestra abusaba de sus víctimas en un área de lectura privada en el salón, que no ese podía ver ni desde el pasillo ni por las ventanas. En esa zona, Whitaker-casada y con dos hijos- tuvo sexo con cuatro de sus alumnos menores de edad en horarios fuera de clases.
De acuerdo con Daily Mail, la mujer les daba regalos a los adolescentes como botellas de alcohol a cambio de favores sexuales. Además del salón de clases, también llegó a llevarlos a hoteles.
Brennen Hooper, otra de las víctimas, dijo que un trabajador de la escuela los descubrió mientras Whitaker estaba sentada en sus piernas.
Supervisores de la escuela del distrito también tenían conocimiento de lo que ocurría con Whitaker e incluso un trabajador relató que encontró a la maestra y a un estudiante en un salón a oscuras y con la puerta cerrada.
Whitaker fue arrestada en junio de 2017 y el pasado octubre, cuando se le dictó sentencia, pidió perdón a las víctimas y a sus familias.
«Siempre estaré avergonzada. Realmente lamento haber traicionado la confianza de los padres y las víctimas«, declaró entre lágrimas, según Elko Daily Free Press.
Pero para Terry Madison la disculpa no es suficiente, pues según la demanda que presentó, las víctimas sufrieron miedo, ansiedad y estrés mental y emocional, baja de autoestima y humillación, reseña Infobae