La corte suprema de Brasil cerró su audiencia de este martes sin abordar el pedido de liberación del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, pese a haberlo incluido en su agenda la noche del lunes.
Las más de cuatro horas de debates de la segunda corte del Supremo Tribunal Federal (STF) estuvieron dedicadas a discutir otros asuntos y el recurso del Lula, que desde abril de 2018 purga una pena de 8 años y 10 meses de cárcel por corrupción, quedó fuera de la pauta.
Los cinco magistrados del tribunal se retiraron sin indicar cuándo abordarían el tema, aunque llegaron a agendar para el martes 25 de junio el tratamiento de otro recurso presentado por la defensa de Lula, que cuestiona directamente al exjuez y actual ministro de Justicia Sergio Moro.
Los dos casos podrían en consecuencia ser tratados el mismo día, dado que el STF no tiene previsto deliberar la próxima semana.
El debate de este martes fue seguido con particular atención ante el impacto causado por la divulgación de mensajes entre Moro y fiscales de la operación anticorrupción Lava Jato, que podrían implicar una colusión de instanciasjudiciales para impedir que el Partido de los Trabajadores (PT) de Lula ganase los comicios presidenciales de 2018.
En el recurso que debía examinarse este martes, los magistrados tenían que decidir si los abogados de Lula tuvieron un amplio derecho a la defensa cuando su condena fue tratada en abril por el STF.
El otro recurso pendiente pide la anulación del proceso por presunta parcialidad del juez Moro, que condenó a Lula en primera instancia, por haber aceptado ser ministro del presidente Jair Bolsonaro cuando este ganó las elecciones en octubre.
El impacto de las revelaciones hechas por The Intercept Brasil se hizo sentir pese a todo en los debates del martes, por ejemplo cuando uno de los magistrados, Gilmar Mendes, afirmó al juzgar otro caso que “un juez no puede ser el jefe del equipo investigación”.
Con información de AFP