Human Rights Watch (HRW) denunció hoy que Rusia ha incrementado los controles legales sobre internet en el país, lo cual restringe la posibilidad de sus ciudadanos de ejercer la libertad de expresión y la libertad de acceso a la información.
«El Gobierno ha creado un arsenal completo de herramientas para reinar sobre la información, los usuarios de internet y las redes de comunicaciones», afirmó Hugh Williamson, director de Europa y Asia Central de HRW, citado por un comunicado de la ONG.
Según Williamson, el enfoque de internet de las autoridades rusas «se basa en dos pilares, el control y el aumento del aislamiento de la Worl Wide Web».
HRW señala que si las medidas impuestas por el Gobierno ruso se llevan a cabo en todo su potencial restrictivo «minarán severamente la capacidad de las personas en Rusia de ejercer sus derechos humanos en línea».
«Las nuevas leyes y reglamentos adoptados en los últimos dos años ampliaron la capacidad ya significativa de las autoridades para filtrar y bloquear el contenido de Internet automáticamente, ya no depende de la cooperación de los proveedores para implementar el bloqueo», advirtió la ONG.
En particular, indica HRW, la ley de «internet soberano» aprobada en 2019 requiere que los proveedores de servicios de internet instalen equipos que permitan a las autoridades bloquear automáticamente el contenido que el Gobierno ha prohibido y redirigir el tráfico de internet.
Además, se refirió a una ley aprobada en 2018 que prevé la imposición de multas a los servicios proxy y las redes privadas virtuales que permiten a los usuarios acceder a contenidos prohibidos.
En 2019, añadió HRW, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) exigió a los proveedores de internet que instalaran equipos especiales que les darán acceso automático a sus sistemas de información y claves para descifrar las comunicaciones de los usuarios sin autorización a través de cualquier proceso judicial.
»Necesidad de proteger la seguridad del estado»
Los legisladores rusos justifican estas reglas con la necesidad de proteger la seguridad del estado, el internet ruso y la privacidad de los usuarios, aunque, según la ONG, en realidad, facilitan la censura y la vigilancia general, y ponen en peligro la seguridad y la confidencialidad de las comunicaciones en línea de las personas.
La víspera el regulador ruso en el campo de las comunicaciones, Roskomnadzor, anunció el levantamiento del bloqueo que pesaba sobre el servicio de mensajería por internet Telegram desde hace dos años, una sanción que incumplían muchos organismos y particulares de este país.
Roskomnadzor valoró positivamente las palabras del fundador de Telegram, Pável Dúrov, en las que expresa su intención de luchar contra muestras de terrorismo y extremismo en el servicio de mensajería.
Un tribunal ruso ordenó el bloqueo de Telegram en abril de 2018 debido a la negativa de compartir con las autoridades los códigos de cifrado de las comunicaciones entre sus usuarios. EFE