El líder opositor Juan Guaidó llega este sábado 25 de enero a España, donde celebrará un mitin en el centro de Madrid, pero no será recibido por el presidente, el socialista Pedro Sánchez, lo que desató una tormenta política en el país.
Reconocido como presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países, entre ellos España, Guaidó se reunirá con la ministra de Exteriores, Arancha González, en un encuentro en la institución Casa de América y no en la sede del ministerio.
Pero el hecho de que no se vea con el socialista Pedro Sánchez, quien durante la jornada visitó zonas afectadas por una tormenta y en la noche asistirá a la gala de los Goya, irritó al entorno de Guaidó y a Washington y provocó fuertes críticas de la oposición conservadora, cercana a los movimientos antichavistas en Venezuela.
Sánchez: «Siempre hemos apoyado a la oposición»
En su primera reacción a la polémica, Sánchez evitó pronunciarse directamente sobre la falta de un encuentro con Guaidó, pero mostró su compromiso con una salida por «la vía democrática» a «una crisis compleja, que va a exigir de diálogo» en Venezuela, en declaraciones a periodistas desde la región de Valencia (este).
«Siempre hemos apoyado a la oposición venezolana y lo que queremos es que se celebren unas elecciones rápidas en Venezuela», dijo Sánchez, recordando, por ejemplo, que el líder opositor Leopoldo López se mantiene refugiado en la residencia del embajador de España en Caracas.
El ministro de Fomento, José Luis Ábalos, muy cercano a Sánchez, alegó en una entrevista este sábado 25-E al diario La Razón que España defiende una «solución democrática equilibrada» y por tanto debe evitar «una posición beligerante» contra el régimen de Maduro.
«Saludo» a la vicepresidenta venezolana
Para marcar la diferencia, el líder del Partido Popular (PP), Pablo Casado, sí verá a Guaidó y tanto el alcalde como la presidenta regional de Madrid, ambos de esta formación de derecha, lo recibirán y le rendirán honores de jefe de Estado.
Casado instó el viernes 24-E a Sánchez a definir «de qué lado está»: si con el presidente Nicolás Maduro o con Guaidó, quien llega a España dentro de una gira europea en la que se vio con el primer ministro británico, Boris Johnson, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron.
Casado ha vinculado la postura a la entrada al gobierno del partido de izquierda radical Podemos, que en el pasado mostró su simpatía y tuvo relaciones con el chavismo.
Su líder y vicepresidente segundo del ejecutivo Pablo Iglesias se limitó a calificar a Guaidó de «dirigente muy importante de la oposición».
No obstante, la ministra de Exteriores reafirmó este sábado que Madrid lo reconoce como «presidente encargado».
El ambiente se enrareció aún más cuando el ministro Ábalos reconoció haber hablado el lunes en el aeropuerto de Madrid con la número dos del gobierno de Maduro, Delcy Rodríguez, que tiene prohibido viajar a la Unión Europea.
Según su propio relato, Ábalos acudió al aeropuerto a recibir al ministro venezolano de Turismo, que es su amigo, y este le pidió que «saludara» a la vicepresidenta, quien viajaba en el mismo avión privado y seguiría en dirección a Turquía.
«Y eso hice, saludarla. Por lo tanto, no hubo tal reunión. Le recordé que no podía entrar en suelo español dadas las sanciones de la Unión Europea», señaló Ábalos.
Ábalos buscó «evitar una crisis diplomática y lo ha logrado», se congratuló Pedro Sánchez, mostrándole su «respaldo» ante el llamado de la oposición a que renuncie.
Contacto con la diáspora
Guaidó violó una prohibición de salir de su país para iniciar el periplo europeo en busca de apoyos para revitalizar su pulso por el poder con Maduro.
Tras visitar Londres, Bruselas, Davos y París, este ingeniero de 36 años llega a Madrid, donde ofrecerá un mitin a partir de las 18H00 locales (17H00 GMT) que se espera multitudinario en la Puerta del Sol, en pleno centro de la capital de España.
Este país europeo, uno de los destinos preferidos por los venezolanos que han abandonado su país por la crisis (4,6 millones desde 2015, según la ONU), alberga a unos 324.000 venezolanos, según cifras oficiales de 2019.