El certificado, que demuestra que el titular ya está vacunado contra el covid-19 o cuenta con una prueba negativa reciente, será necesario para acudir a todos los eventos con un aforo de más de 50 personas.
En Francia, las personas que deseen asistir a lugares públicos como cines, museos, eventos deportivos y otros sitios culturales, deberán contar con un pase sanitario, un documento para demostrar que el titular ya está vacunado contra el covid-19 o cuenta con una prueba negativa reciente. El sistema se lanzó este miércoles por un decreto del Ejecutivo en medio de la cuarta ola de coronavirus que atraviesa el país, informa France 24.
Dicho certificado será necesario para acudir a todos los eventos con un aforo de más de 50 personas. Asimismo, el Gobierno multará con 1.500 euros a las empresas que no cumplan con la revisión correspondiente del certificado a sus clientes. Mientras, las entidades que reincidan en la falta serán sancionadas con cantidades mayores.
Se prevé que en agosto el sistema se aplique en restaurantes, cafeterías, centros comerciales, así como en aviones y trenes para viajes de larga distancia. Sin embargo, la ampliación de la medida se llevará a cabo cuando el Parlamento francés dé luz verde a la iniciativa, teniendo en cuenta que fue emitida como decreto gubernamental.
Además, los profesionales del sector sanitario y los trabajadores de residencias para las personas de tercera edad deberán vacunarse contra el covid-19 desde septiembre para poder seguir trabajando y recibir su salario.
En cuanto a las mascarillas, su uso volverá a ser obligatorio al aire libre en el departamento Charente Marítimo y Pirineos Orientales, regiones en las que ha empeorado la situación sanitaria.
Críticas y protestas
Las medidas impuestas ya han desatado críticas entre los políticos franceses. Incluso, se han opuesto algunos legisladores del partido La República en Marcha del presidente Emmanuel Macron. «La protección de la salud pública ha sido nuestra prioridad desde marzo de 2020, pero no ha amenazado la cohesión de nuestro país porque las normas eran las mismas para todos. La salud va a fracturar a nuestro país», destacó Pacome Rupin, uno de los miembros de dicha fuerza política.
Por su parte, Jordan Bardella, vicepresidente de Agrupación Nacional (ultraderecha), arremetió contra el pase sanitario, al considerar que representa «un modelo de vigilancia».
El sábado pasado, alrededor de 114.000 personas salieron a las calles del país para protestar contra las nuevas medidas sanitarias.
Entretanto, la nación europea contabilizó este martes 18.000 infectados por coronavirus, lo que representa un 150 % más de contagios en una semana. Mientras, el 53 % de la población adulta ya ha completado su curso de inmunización, junto con el 70,9 % que cuentan con al menos una dosis de un componente anticovid.