Foto de una niña con meningitis pone en jaque al gobierno británico

Su madre compartió la imagen de la pequeña Faye Burdett al borde de la muerte. Lidera una campaña que ya llegó hasta la Cámara de los Comunes

Faye Burdett luchó solo once días contra la meningitis. Sus padres decidieron que muriera en paz.

Faye Burdett tenía dos años y murió como consecuencia de meningitis el pasado 14 de febrero, cuando el mundo celebraba San Velentín. Fueron dos semanas de pelear contra una enfermedad que se tornó irreversible. Su madre, Jenny decidió compartir con el mundo la imagen de su pequeña moribunda, mientras yacía conectada a decenas de aparatos en la sala de cuidados intensivos en Evelina London Children’s Hospital. Esa fotografía, ahora, pone en jaque el sistema sanitario del Reino Unido y deberá ser tema de debate en la Cámara de los Comunes.

Cuando Faye se mostró muy dolorida y con erupsiones en su frente, sus padres la llevaron de urgencia hasta una sala de primeros auxilios en Kent. Pero en la ambulancia sufrió un paro cardiorrespiratorio y los médicos lograron revivirla. La situación se tornó rápidamente dramática y de inmediato le diagnosticaron meningitis. Los profesionales le dijeron a sus padres que debían amputar miembros de la pequeña y que aún haciendo esto su supervivencia sería casi imposible. Entonces, en el día de San Velentín, decidieron que Faye dejara de sufrir. No despertó más.
Evelina London Children’s Hospital, en el Hospital Saint Thomas.
«Faye fue llevada a emergencias con una erupsión en su frente, luego fue transferida al hospital de niños de Evelina donde su corazón se detuvo en la ambulancia. La revivieron y pasaron horas tratando de estabilizarla. Le dimos un uno por ciento de posibilidades de sobrevivir, pero nos probó que estaban equivocados y siguió luchando, después de unos pocos días. Pero la septicemia comenzó a afectarla más y se tomó la decisión de removerle un miembro se tomó, pero debía ser masivo, amputación total de pierna y un brazo y cirugía plástica«, relató su madre en un mensaje que transmitió a través de su amiga Charlene Reed.
Fue allí cuando surgió el dilema más dramático que un padre pudiera tomar: seguir adelante sabiendo que moriría en una cirugía llena de riesgos y con pocas posibilidades de supervivencia o dejarla irse en paz. «Nuestra hija no estaba posibilitada de soportar toda la operación cuando la septicemia había consumido TODO su cuerpo, y se desangraría hasta la muerte. ¡Ella no merecía terminar su diminuta vida así!«, añadió Jenny. «Decidimos lo último y luego vimos a nuestra pequeña niña dormirse y a las 9 pm del 14 de febrero finalmente se quedó dormida para siempre. Todo esto en sólo 11 días«, concluyó.
La polémica decisión de publicar la fotografía de Faye surgió a partir de una política de salud del gobierno británico por el cual se decidió que aquellos bebés que nacieron luego del 1° de julio último serían vacunados en forma gratuita. En cambio, todos aquellos niños mayores a cinco meses deberían pagar nada menos que 650 dólares por aplicación, situación que dejó afuera del plan a miles de menores. Ahora, la familia Burdett inició una campaña de concientización y para que las autoridades sanitarias británicas permitan la vacunación libre para aquellos bebés mayores a cinco meses.
En poco menos de cuatro días, la petición hecha online ya cuenta con más de 235 mil firmas, lo cual asegura que el tema deberá tratarse en la Cámara de los Comunes. «No queremos que la muerte de Faye haya sido en vano«, concluyó Jenny, sabiendo ahora que su anhelo de que la vacuna llegue a todos pueda cumplirse.
INFOBAE