La Justicia francesa ha recibido dos demandas penales este jueves contra las empresas de la alimentación Ferrero y Nestlé ante los casos de intoxicación grave tras consumir productos de chocolate Kinder (Ferrero) y pizzas congeladas Buitoni (Nestlé).
Así lo informó la ONG «Food Watch» después de que a partir de marzo se declarasen varios casos de intoxicación por la bacteria E.Coli, en el caso de las pizzas precocinadas, y de salmonela en el de los chocolates.
Hasta momento, se han contabilizado 56 personas enfermas -con una media de edad de siete años- por haber ingerido productos de Buitoni. De entre ellos, dos niños murieron después de comer la gama de pizzas Fraich’Up.
Asimismo, 81 personas resultaron contaminadas con salmonela -con una media de edad de cuatro años- por culpa de los huevos Kinder de Ferrero, de los que 22 tuvieron que ser hospitalizadas.
«Exigimos que se investiguen a fondo los dos asuntos y se depuren responsabilidades lo más rápido posible para que las víctimas tengan respuestas a sus demandas legítimas», urgió en un comunicado difundido por «Food Watch» el abogado François Lafforgue.
La ONG precisó que el objetivo también es «terminar con la impunidad de las multinacionales».
La fábrica de Biutoni en Caudry (norte de Francia) fue objeto de una prohibición temporal de las autoridades para producir pizzas, mientras que la planta de Ferrero en Arlon (Bélgica) fue cerrada y se prevé que reabra en junio.
Las demandas penales fueron presentadas hoy ante el departamento de sanidad pública del Tribunal Judicial de París por el bufete TTLA en nombre de «Foodwatch» y de varias víctimas alegando siete infracciones graves, entre ellas «falsedad agravada», «amenazas involuntarias contra la integridad de la persona» y «puesta en peligro a terceros».
En abril, cuando estalló el escándalo, la Fiscalía francesa ya había anunciado una investigación por «homicidio involuntario», «falsedad» y «puesta en peligro a terceros» por la muerte de los dos niños tras la ingesta de pizzas Fraîch’Up (Buitoni). EFE