Estas fueron las últimas palabras del colombiano ejecutado en China

Juan José Arciniegas se despidió de sus familiares y les expresó su despreocupación por su destino 

EL Nacional

“Lo bonito de la vida, que me recuerden con cariño, con amor. Estoy tranquilo, muy relajado, no me preocupo por nada”, dijo Ismael Enrique Arciniegas, primer colombiano sometido a pena de muerte en China por narcotráfico, en la última conversación telefónica que sostuvo con su hijo, Juan José Herrera, quien vive en Cali.

“Que Dios te bendiga, que yo voy a estar con Dios y contento, porque estoy seguro de que ellos me van a perdonar todos mis pecados que cometí como ser humano”, expresó Arciniegas durante la llamada.

El colombiano de 74 años fue capturado en 2010 cuando portaba cuatro kilos de droga. En sus últimos momentos de vida transmitió a sus familiares el agradecimiento del acompañamiento por las autoridades chinas.

“Estoy dándole gracias al gobierno de China por todo lo que he recorrido, a todas las personas que han estado a mi lado: los oficiales de policía, todos ellos. Nada pierdo ya”, agregó.

“Sigue tu ritmo de vida normal, con tu trabajo, tus tatuajes. Yo te admiro mucho por todo lo que has salido adelante. Que luche por eso, que luches por tus tatuajes”, le dijo Arciniegas a su hijo.

También pidió a sus familiares hacer obras que ayuden al prójimo, ya que se debe cuidar “la vida eterna”.

Por último le envió un mensaje a sus nietas: “Pídele a Dios que eres una niña santa y buena. Estudie y salga adelante en la vida. Danielita, que Dios te bendiga, quiera mucho a su hermanita”.