Estados Unidos exhortó el viernes a los países que votaron para que Venezuela obtuviera una banca en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU a observar la reacción del gobierno de Nicolás Maduro a las marchas opositoras convocadas este fin de semana.
«Pedimos a los países que votaron por Maduro que presten atención a sus acciones el sábado», dijo el encargado de negocios para la Oficina Externa de Estados Unidos para Venezuela, James Story.
«¿Este es un régimen que tendría que estar en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU?», se preguntó el diplomático en una audioconferencia con periodistas.
«La respuesta es no, para nada, por la intimidación, el terrorismo y la fuerza usada contra su propio pueblo», razonó.
En una decisión que generó fuertes protestas de Estados Unidos, países latinoamericanos y oenegés, Venezuela obtuvo hace un mes un asiento en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, pese a que su propio historial en la materia fue cuestionado desde la propia organización.
La votación, que fue secreta, arrojó 105 apoyos para Venezuela entre los 193 miembros de las Naciones Unidas.
El gobierno de Maduro, rechazado por medio centenar de países que reconocen como mandatario interino al jefe parlamentario y líder opositor Juan Guaidó, ha sido acusado de graves violaciones de derechos humanos, en particular por la oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos.
Story, quien era el diplomático de mayor rango en la embajada de Estados Unidos en Caracas hasta la suspensión temporal de sus operaciones en marzo tras la ruptura de relaciones por parte de Maduro, dijo que Washington mantiene su firme apoyo a Guaidó junto con otros 57 países.
El líder opositor, que busca la salida del poder de Maduro para instaurar un gobierno de transición y llamar a nuevas elecciones, convocó a sus seguidores a salir este sábado a las calles masivamente para «reconstruir» Venezuela.
«La gente tiene el derecho y el deber de decir ¡Ya basta!», dijo Story, destacando que todos los días hay «centenares de manifestaciones» en Venezuela pese a «la intimidación del régimen y los problemas económicos».
Story llamó también a los militares a proteger los derechos del pueblo venezolano, no a los «colectivos» armados que apoyan a Maduro, ni a la ministra de servicios penitenciarios, Iris Varela, conocida por sus posturas antiestadounidenses y por sus amenazas de cárcel a Guaidó.
Los militares venezolanos «tienen que pensar cuál es el futuro que quieren y ese futuro no viene por intimidar a los manifestantes pacíficos que van a estar en la calle mañana», dijo el diplomático.
Story reiteró que no puede haber elecciones libres con Maduro al mando y dijo que Estados Unidos trabaja con la comunidad internacional para aumentar aún más la presión.
«Vamos a ver sanciones secundarias en contra de empresas y países que todavía están apoyando la dictadura», tras considerar «efectiva» la estrategia.
AFP