Se estima que 1,3 millones de los 3,3 millones de venezolanos que según la Organización de Naciones Unidas abandonaron su país desde enero de 2016, en una de las mayores oleadas migratorias y de refugiados del mundo, se encuentran en Colombia.
Y el país necesita ayuda para afrontar su asistencia, reconoció Duque en Londres.
“Muchos migrantes han acudido a los hospitales colombianos para la atención y dado que no están asegurados terminan creciendo deudas”, dijo a los periodistas al término de una reunión con la primera ministra Theresa May.
“Fue muy clara en reconocer que hoy el Reino Unido está buscando herramientas financieras para ayudar a Colombia a mitigar esos efectos, y en contribuir a la atención en materia de vacunación», aseguró May durante el encuentro.
Ambos dirigentes hablaron también de Venezuela en el plano político, indicó Duque.
“Puede ser bastante enfático en que cualquier solución empieza primero por el cese de la usurpación y la dictadura, segundo que se haga el gobierno de transición y tercero que haya un llamado a elecciones libres”, afirmó.
El gobierno inglés fue uno de los primeros en Europa en reconocer al líder opositor, Juan Guaidó, como presidente interino de Venezuela.
En cuanto al proceso de paz en Colombia, y pese a las críticas de que la reincorporación de los ex guerrilleros a la vida civil está tardando mucho más de lo previsto, Duque aseguró que May ha respaldado «la agenda que nosotros tenemos para garantizar que las personas que están en la reincorporación puedan hacer ese paso de la vía de la violencia a la vía de la legalidad”.
A raíz del acuerdo de paz firmado en 2016 por el anterior presidente, Juan Manuel Santos, con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, se previó que dicho proceso durase dos años y medio, pero el gobierno de Duque estima ahora que llevará de siete a ocho años alegando su complejidad.
Ambos mandatarios hablaron de comercio y cooperación en materia medioambiental, tecnológica y de industrias creativas.