Cuatro fallecidos deja un accidente de helicóptero sanitario en Portugal

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Cuatro personas han muerto, entre ellas un médico español, al desplomarse un helicóptero del Instituto de Emergencia Médica (INEM) portugués en Valongo, distrito de Oporto.

Las víctimas mortales -dos pilotos y dos miembros del equipo médico del INEM- volvían a su base en Macedo de Cavaleiros (distrito de Braganza) tras participar en una operación de urgencias para trasladar a un enfermo al Hospital de Santo António de Oporto.

El médico fallecido ha sido identificado como Luís Vega, ciudadano español de 50 años. Vega trabajaba para el Hospital de Santa Maria da Feira (Aveiro) desde hace casi dos décadas y formaba parte del equipo de urgencias del INEM.

Según confirma un portavoz del INEM, se perdió contacto con la aeronave a las 18.30 hora local, poco después que había despegado del hospital en la zona metropolitana de Oporto. Inmediatamente se lanzó una operación de rescate con efectivos de la Autoridad Nacional de Protección Civil (ANPC) y la Fuerza Aérea portuguesa, pero fueron los bomberos locales quienes finalmente localizaron el helicóptero accidentado en una zona de campo.

El helicóptero -un Augusta A109S- se desplomó en una tarde en la que se han registrado fuertes lluvias en el norte de Portugal. De momento, se desconoce si los factores ambientales tuvieron que ver con el accidente. Los equipos de rescate sí confirman que la niebla ha complicado la búsqueda de la aeronave afectada, proceso que se extendió a lo largo de la tarde.

En agosto del año pasado el piloto de un helicóptero que participaba en las labores de extinciones de un incendio forestal en Castro Daire -distrito de Viseu- murió cuando su aeronave se desplomó y explotó. Una investigación posterior estableció que, en su afán de luchar contra las llamas, el piloto se había despistado y dado contra unos cables de alta tensión.

El accidente actual se produce en un fin de semana de accidentes inusuales en Portugal. La noche del viernes 28 personas -entre ellas, varios turistas extranjeros- resultaron heridas al descarrilar uno de los icónicos tranvías de Lisboa. Cuatro personas pasaron varias horas atrapadas dentro de la estructura colapsada del eléctrico número 28, que quedo completamente destruido por el impacto, reseña El Mundo