Crece el rechazo a los venezolanos «raspacupos» en Aruba

Cada vez crecen más las restricciones a Venezolanos para viajar a Aruba. Para ingresar a la islaes necesaria una carta de respaldo que ahora deben otorgar arubeños o residentes a visitantes venezolanos sin reserva de hotel.

Pro no cualquiera puede dar una carta de garantía. De acuerdo con El Nacional, quien la otorgue debe demostrar que se tienen ingresos por cantidad sobre los 4.500 florines (2.500 dólares) al mes para respaldar la estancia del extranjero.

Varios sectores de Aruba, desde empresarios hasta taxistas, han presionando al gobierno de esa nación para que aumenten las regulaciones a los venezolanos que vayan a la isla. Los defensores de esta propuesta aseveran que es para combatir a los “raspacupos” que viajan con Cencoex para obtener las divisas en efectivo.

Aunque no es nuevo, el fenómeno de los “raspacupos” en Aruba ha ido en crecimiento.

Señala Tibisay Romero en su artículo para El Nacional, que quienes ingresan a la isla con este propósito buscan sacar el máximo de los 700 dólares que pueden obtener por 7 días de estadía y traer a Venezuela la mayor cantidad de efectivo.

Por las calles de Aruba se ven grupos caminando bajo el sol y recorriendo grandes distancias. Entre los insulares esa peregrinación se ha convertido en un signo de turistas venezolanos en busca de dólares. La escena es cada vez más frecuente y rechazada por quienes residen en Aruba.

Ronella Tjin Asjoe-Croes, jefe de la Autoridad de Turismo de Aruba (ATA), explica que no hacen distinción entre el “tipo” de turista venezolano que llega al país.

“El mercado venezolano es muy importante, representa el segundo de la isla, de hecho ATA ha estado presente por 43 años promoviendo responsablemente el turismo de Venezuela hacia Aruba con el apoyo de nuestros socios de turismo como las aerolíneas, operadores, representantes de hoteles y agencias de viajes”, dice.

En 2014, Aruba recibió 249.593 turistas desde Venezuela que representó 32,75% de crecimiento en comparación con 2013. Para 2015, hasta el mes de agosto, 191.798 venezolanos habían visitado la isla, lo que representa un aumento de 49,88% en comparación con la misma temporada de 2014, según fuentes de la ATA.

El crecimiento ocurre pese a que el gobierno venezolano ha arreciado las restricciones al uso de divisas limitando su uso por días y destino y centralizando los trámites en la banca pública.

Los “raspacupos” no desaparecen, pero la liquidación de divisas para viajes en el extranjero se ha reducido 36% con respecto al año pasado, de acuerdo con datos de la firma Ecoanalítica.

MEDIDAS

Hace aproximadamente un mes se encendieron las alarmas en Aruba. Para aquellos comerciantes que se prestaban a raspar el cupo de divisas, ya no resulta tan sencillo el negocio con los turistas venezolanos. El gobierno insular comenzó a sancionar negocios que se dediquen a esas prácticas con multas por 10.000 florines (5.714 dólares, aproximadamente). La penalidad incluye el bloqueo del punto de venta.

Pero, ante las restricciones se retomaron modos ya conocidos por la generación de viajeros Cadivi en aprieto: Los venezolanos se acercan a los arubeños y les ofrecen cancelar con su tarjeta de crédito las compras a cambio del monto gastado en efectivo.

Otros han comenzado a comprar cervezas en cajas —con sus tarjetas venezolanas— que revenden en la playa, en estacionamientos de particulares o en los negocios de chinos para obtener el efectivo. En un supermercado de Schotlandstraat se pueden armar filas de compradores venezolanos en busca de cerveza, que son despachados por la puerta trasera del establecimiento como ocurre con los productos regulados en automercados en Venezuela.

¿ACOSADOS?

“La gente en sí no tiene problemas con que vengan los venezolanos, pero que no se metan con los arubeños como algunos lo están haciendo. Una persona va a un supermercado y se le acercan para comprar la mercancía y conseguir dinero en efectivo. Otros piden ayuda en forma incorrecta y hasta hacen trucos para robar a personas. La gente aquí en Aruba se siente acosada. Ha ocurrido que han perseguido a personas hasta sus casas y luego los asaltan. Por supuesto, este fenómeno no pasa con todos, pero es ahora la percepción que hay en general sobre los venezolanos. En una isla pequeña como Aruba, muy rápidamente esto se convierte en un problema”, señala el periodista Tito Laclé, director del portal informativo NoticiaCla.com.

La queja también la comparten venezolanos que viven en Aruba.

“Está mal que hayan encontrado a venezolanos durmiendo en sillas de los hoteles, en las playas, bañándose en fuentes de sitios públicos y peor aún con actitudes delictivas como robos en supermercados o tiendas, pero no pueden olvidar aquí que muchos venezolanos trajimos nuestro dinero y empeño para trabajar en la isla, que somos gente decente y no aprobamos lo que está sucediendo. Esto también es consecuencia del desastre económico de nuestro país”, expresó una venezolana que está residenciada legalmente desde hace cinco años en Aruba.

 

La tensión que han generado los recientes incidentes, sin embargo, ha deteriorado el vínculo. “El sentimiento de malestar hacia todo aquel que tenga acento venezolano es increíble. Ahora creen que todos somos ladrones o tracaleros. Me da pena que otros venezolanos hayan ingresado a la isla con conductas negativas, nos han rayado”, indicó otra venezolana en Aruba.

SM